EUR/USD
La semana pasada vimos como el euro se estuvo apreciando nada más arrancar la jornada del lunes, llegando en algunos momentos a superar el 1,24, sin embargo, en la recta final, se desinfló y acabó por debajo de 1,23, perdiendo unos 40 pips en el cómputo de la semana.
El lunes empezó la subida del euro, basada en una presión de venta sobre el dólar a causa de la situación política de EE.UU. con Rusia y China, que está jugando un papel más relevante que los propios acontecimientos económicos, ya que incluso un buen dato de las ventas minoristas fue ignorado por el mercado. El martes el euro tocó máximos de semana a primera hora por el temor a la relación de EE.UU. con Rusia por el ataque a Siria del fin de semana anterior, sin embargo, los malos datos del índice ZEW de confianza inversora, tanto en Alemania como en la eurozona, borraron las ganancias de la moneda única.
A partir de aquí, el par se situó en un margen de unos 40 pips hasta la tarde del jueves, donde empezaron las pérdidas del euro que se extendieron a la jornada del viernes llegando incluso a perder el 1.23, motivado primero por la subida del rendimiento del bono americano a 10 años y luego por la previsión de que el Banco Central Europeo reduzca expectativas esta semana tras los malos datos de confianza del inversor y de IPC anual acumulado hasta marzo.
Esta semana, el día clave será el jueves con la decisión sobre los tipos de interés en Europa y la posterior rueda de prensa de Draghi. Aunque también tendremos noticias relevantes al otro lado del Atlántico, hoy conoceremos el dato de marzo de venta de viviendas de segunda mano y mañana el de las nuevas. Y el viernes el PIB del primer trimestre.
Ante este escenario, marcamos para esta semana una zona de soporte de 1,2180 y resistencia de 1,2460.
EUR/GBP
Parece ser que el cruce con la libra empieza a despertar y a recuperar movimiento. La semana pasada vimos como el euro ganaba más de 100 pips, tras empezar la semana en torno a 0,8650 y acabar por encima de 0,8760.
Las dos principales subidas del euro fueron en la jornada del miércoles, tras los malos datos del IPC británico, tanto el mensual de marzo como el anual acumulado hasta entonces, y el jueves tras las declaraciones de Carney que, si bien no dijo nada nuevo, los inversores notaron en ellas cierto temor en el tono de su discurso al hablar sobre el Brexit y las posibles subidas de tipos.
Esta semana solo tenemos el viernes los datos del PIB del primer trimestre, el anual acumulado y las declaraciones de Carney. A parte de lo ya mencionado anteriormente en Europa.
Así pues, marcamos para esta semana una zona de soporte de 0,8680 y zona de resistencia 0,8890.