En mi último artículo, que fue hace poco más de un mes (y parece que paso una vida), realicé un análisis de la soja con un tono muy alcista. Realmente parecía que iba a seguir subiendo pero no, incluso ocurrió lo contrario, cayó mucho. Estamos hablando del precio de la soja. Esto nos deja una enseñanza muy importante: el precio tiene el riesgo de subir o bajar sin ninguna explicación, o sea de tener un comportamiento que no podemos dominar y, por ende, complicar nuestra gestión comercial. Pero la buena noticia es que existen las herramientas llamadas Futuros y Opciones para gestionar este riesgo, mitigarlo y poder atravesar este viaje que semeja una montaña rusa.
Con los futuros y opciones, las personas que trabajan día a día con la soja, pueden vender o comprar a niveles de precio pre establecidos que se ajusten a los niveles que ellos aspiren y se ajusten a sus presupuestos. En mi artículo anterior decía que hay que comprar opciones put. Si bien el precio podía haber subido más, estos niveles de precio son muy buenos y se pueden obtener sin vender grano físico. Se gasta una cantidad en la compra del put y si la soja cae a uno no le afecta esa situación porque se aseguró ese nivel de precio elegido, y si el grano sigue subiendo se puede ganar mucho más vendiendo luego el grano físico.
Hace tres meses titulaba en mi artículo que se venían meses interesantes con respecto a la soja y efectivamente estos últimos meses han sido los más movidos de la historia. Casi toca máximos históricos, luego el 17 de junio la soja tuvo la caída diaria más grande de la historia. Luego subió, luego bajó, subió, bajó, y luego de varios intentos no se levantó y pasó a verse mal herida. En seguida pasó a tener una tendencia bajista. Perdió cerca de 300 centavos, cerca de un 20%. Aguantó estoicamente esa volatilidad infernal y ahora de a poco quiere levantarse y tomar vuelo.
A nivel técnico estamos en un punto donde puede buscar consolidarse en el rango en el que viene operando hace un mes, pero también puede subir o bajar tranquilamente 100 centavos para un lado o para el otro. A nivel de fundamentos, estamos en pleno mercado climático en EE.UU. y todavía queda tela por cortar. Como decía en el artículo anterior, hay zonas ok y otras muy secas. Los informes semanales de los lunes sobre el estado de los cultivos en la plena siembra de EEUU muestran que las condiciones han empeorado en algunos estados pero en otros están bien.
La tendencia climática en el Hemisferio Sur a mediano y largo plazo muestra que para la primavera y principios de verano se espera un 50 por ciento de chance de una fase neutral del fenómeno de El Niño y 50% de La Niña, esto quiere decir que no llovería mucho y puede golpear a nivel productivo y por ende afectar la oferta y el sostener el precio, a mediano plazo. A corto plazo seguirá la volatilidad. Es importante aclarar que estos niveles de precio son buenos y se pueden aprovechar. Si no se posee grano físico en este momento se puede hacer con la compra de opciones put.
Como si todo esto fuera poco el 30 de junio fue el informe semestral de área sembrada, y sorprendió a todos con stocks y áreas por debajo de lo estimado. La realidad es que a nivel de fundamentos este mercado climático en EE. UU. estuvo lejos de ser ideal lo cual podría haber catapultado el precio de la soja, pero los especuladores prefirieron vender y obtener ganancias que se venían acumulando hace diez meses. Si esta plata vuelve, podemos llegar a alcanzar precios más altos. El tiempo dirá.