Las bolsas europeas cerraron de forma mixta y sin grandes variaciones, con los inversores muy pendientes de la “lucha política” al otro lado del Atlántico donde, tanto demócratas como republicanos, sin olvidar al presidente Trump, siguen utilizando el “nuevo” paquete de estímulos para intentar sacar rédito electoral. Así, Trump, tras forzar la ruptura de las negociaciones, negociaciones que, también hay que decirlo, no estaban yendo a ninguna parte ya que las posturas sobre el importe del programa y el contenido del mismo seguían muy distantes, se mostró favorable a aprobar pequeños paquetes puntuales de estímulos como el dirigido a “rescatar” a las aerolíneas, o uno que incluya nuevos apoyos a las pequeñas empresas e, incluso, un nuevo pago directo de 1.200 dólares a los hogares estadounidenses. Trump dijo estar dispuesto a firmar de forma inmediata las leyes que aprobara el Congreso con estos fines, además de señalar que quedaban fondos sin utilizar de programas anteriores que podrían ser usados para financiar estas ayudas.
Si bien en los mercados de valores europeas el impacto de estas declaraciones fue reducido, no ocurrió los mismo en EE.UU., donde los índices, yendo de menos a más, cerraron la jornada con fuertes avances - para el Dow Jones fue la mejor sesión desde el pasado mes de julio -. Además, los inversores en este mercado están cada vez más convencidos de que el candidato demócrata, Biden, ganará las elecciones con mucho margen, lo que evitará disputas posteriores, y que los demócratas se harán con el control de ambas cámaras, lo que podría conllevar la aprobación tan pronto como en enero de un gran paquete de ayudas fiscales que, incluso, podría incluir nuevos proyectos para el desarrollo de infraestructuras. Señalar, por otro lado, que, al igual que había ocurrido en las bolsas europeas durante la jornada, AYER en Wall Street fue el sector de las materias primas minerales el que mejor se comportó, apoyándose en el fuerte repunte que había experimentado el precio del cobre. Además, y como siempre que se habla de estímulos, los sectores más ligados al ciclo como el industrial tuvieron un buen día en las bolsas estadounidenses, donde también destacó el comportamiento de las aerolíneas, por motivos obvios.
Igualmente, y durante la jornada, se habló mucho del tratamiento experimental contra el Covid-19, basado en un coctel de anticuerpos, desarrollado por Regeneron que había recibido el presidente Trump y que, aparentemente, tan bien le había funcionado. Igualmente, AYER se conocieron las intenciones de otra biofarmacéutica, Eli Lilly (NYSE:LLY), de pedir a los reguladores la aprobación por la vía de emergencia de otro tratamiento contra el coronavirus de origen chino basado en anticuerpos, el cual parece que está teniendo muy buenos resultados para remitir los síntomas en casos leves y moderados. Buenas noticias que también fueron bien recibidas por los inversores.
HOY esperamos que las bolsas europeas abran con alzas, animadas por el buen comportamiento de Wall Street AYER, comportamiento que se ha extendido esta madrugada a las principales bolsas asiáticas. Nuevamente serán los valores más ligados al ciclo económico los que mejor se comporten, al menos al comienzo de la sesión, con los industriales, la banca y los relacionados con las materias primas minerales a la cabeza. No obstante, esperamos que la actividad en estos mercados siga siendo reducida, ya que muchos inversores se mantienen reticentes a incrementar sus posiciones de riesgo ya que temen el impacto que en algunas de las grandes economías de la Zona Euro pueda terminar teniendo la “segunda ola” de la pandemia. En este sentido, AYER en Francia el INSEE rebajó sus expectativas de crecimiento del PIB del país en el 4T2020 -ahora espera que no crezca con relación al trimestre precedente; en sus estimaciones anteriores contemplaban un crecimiento del 1%-. Además, “el factor brexit” sigue latente, con el Gobierno británico y la Unión Europea (UE) lanzándose constantes órdagos, mostrándose incapaces de acercar posturas, lo que incrementa de forma exponencial la probabilidad de que finalmente el Reino Unido salga de la región sin acuerdo, lo que sería muy negativo para ambas economías.