Para la elaboración del ranking, diferentes variables objetivas como subjetivas, son tomadas en cuenta. Como por ejemplo, el PBI de cada ciudad y per cápita, la seguridad, los medios de transporte, capital humano, la competitividad de las telecomunicaciones, el costo de vida, la percepción de los empresarios de las ciudades, la capacidad de financiación, entre otras.
Según un informe que analiza la situación de 48 ciudades latinas. En los 10 primeros lugares figuran: Santiago de Chile, Sao Paulo, Ciudad de México, Lima, Bogotá, Monterrey, Rio de Janeiro, Ciudad de Panamá, Valparaíso y en décimo lugar Buenos Aires.
En los últimos años, Chile se ha destacado por combinar mejor la calidad de vida, el potencial de negocios y el desarrollo profesional. Por lo que el país provee un excelente entorno para la inversión extranjera directa Mientras que Sao Paulo ha sobresalido gracias a su gran tamaño y por poseer la gran plaza bursátil latinoamericana; por su parte la Ciudad de México, posee una alta calidad en su oferta de formación universitaria y logró una elevada localización de compañías multinacionales.
El país trasandino se posiciona primero en lo que respecta al PBI per cápita de la región, luego le sigue Argentina, Uruguay y Panamá. A pesar de eso, Buenos Aires y Caracas, son las dos ciudades donde la seguridad ha empeorado notoriamente. Adicionalmente la ciudad venezolana, posee un elevado grado de deterioro en su calidad de vida, al igual que La Paz.
Las ciudades que se destacan en cuanto a la dimensión de infraestructura, conectividad física y su capacidad aeroportuaria son: Sao Paulo, Ciudad de México, Ciudad de Panamá, Bogotá y Buenos Aires. Por último, en lo que respecta al capital humano, las ciudades de América Latina con mejor oferta formativa para la educación superior son Sao Paulo, Buenos Aires, Ciudad de México, Bogotá y en quinto lugar Santiago de Chile.
La tendencia reciente muestra un desempeño ascendente de las ciudades de Lima, debido a su dinamismo económico, ofrece un ambiente de estabilidad y confianza económica, con una proyección del 6% de crecimiento en Perú para este año y a Bogotá, no solo por la alta calidad en su formación universitaria, sino también por las actuales mejoras en los índices de seguridad, convirtiéndose para este año en una de las ciudades más segura de la región.