Las previsiones del FMI pasan factura a todos los mercados

En terreno negativo entró ayer la Bolsa de Santiago, Chile, luego de una seguidilla de jornadas en positivo, en línea con el desempeño de los mercados externos después de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) redujera las previsiones de crecimiento global recortando la previsión del PIB en Asia-Pacífico, lo que hace temer por una desaceleración en China. El índice IPSA culminó la sesión con una caída del 0.85%, situándose en los 4.266,65 puntos, sin lograr superar la resistencia ubicada en los 4.300 puntos. Las acciones eléctricas fueron las que más cedieron, anotándose un retroceso del 1.32%, liderando las caídas AES Gener (-2.26%) y Endesa (-2.15%).

Paralelamente, la acción que logró mayor alza fue AFP Cuprum, con un 40.42%, un día después de que Principal Financial Group llegara a un acuerdo con el Grupo Penta para adquirir el 63,44% de los títulos que este posee en Cuprum. Cabe recordar que de continuar la tendencia alcista, el IPSA podría ir en busca de los 4.500 puntos, mientras el soporte a las caídas se encuentra en 4.180 puntos.

En Nueva York, Wall Street culminó la sesión de ayer a la baja afectado por el informe del FMI, que dijo que la desaceleración mundial se está profundizando al reducir sus previsiones de crecimiento nuevamente, advirtiendo a los líderes de EE.UU. y Europa de que de no solucionar sus problemas financieros se prolongaría el debilitamiento económico mundial. Sumado a esto encontramos el nerviosismo que genera el inicio de la temporada de resultados empresariales en EE.UU., donde la primera empresa en salir al ruedo fue el gigante del aluminio Alcoa, que rebajó su previsión de crecimiento a 6% desde el 7% que estimaba, perdiendo 143 millones de dólares en el tercer trimestre. Así, el índice Dow Jones culminó perdiendo 0.81%, el selectivo S&P 500 lo hizo un 0.99% y el tecnológico Nasdaq bajó un 1.52%.

En Asía-Pacífico, las principales bolsas también terminaron la jornada de hoy con pérdidas, encabezadas por el Nikkei, en Tokio, con una caída del 1.98%. Al igual que en las demás plazas, la desaceleración del crecimiento mundial proyectada por el FMI fue la causante del mal ánimo de los inversionistas. Así, también sufrieron perdidas el Hang Seng de Hong Kong, cayendo un 0.08%, la Bolsa de Seúl un 1.56% y la de Singapur un 1.05%. La única plaza que cerró en positivo fue la de Shanghái, con un alza del 0.22%.

La situación no es diferente en la Eurozona, donde las principales plazas también operan en números rojos. El Euro Stoxx cae un 0.08%, el DAX alemán lo hace un 0.30% y el FTSE 100 londinense pierde un 0.40%. El motivo es el mismo: temores ante la desaceleración China y la crisis de la deuda Europea, reaccionando de forma negativa ante la posibilidad de que esta situación produzca un impacto negativo en las grandes empresas del continente.