El martes pasado tuve la gran suerte de poder disfrutar de la charla que dio Rafael Nadal en Coruña. Ya había leído tanto su libro como el de su entrenador, su tío Toni, pero el estar ahí, en directo, escuchando las sabias palabras de alguien que lo ganó todo, fue un auténtico privilegio. Se pueden sacar muchas conclusiones de un deportista que tiene como uno de sus grandes puntos fuertes su fortaleza mental. En este artículo destaco las siguientes:
– Ponerse objetivos que dependan de uno mismo. Cuando el entrevistador le pregunta a Nadal si su gran objetivo para 2017 era ganar el Roland Garrós, él contesta:”Y si no gano… ¿qué hago, me corto la cabeza?”. Su objetivo es entrenar bien cada semana y hacer lo máximo que pueda, al igual que nuestro objetivo debería ser no una rentabilidad concreta, sino aplicar el plan de trading que hemos testeado previamente. Si tiene esperanza matemática positiva, el ganar consistentemente es sólo cuestión de tiempo.
– El éxito depende de muchos factores. Cuando estaba hablando de su Academia de Manacor, el entrevistador le pregunta si al ver a un joven tenista entrenar se da cuenta inmediatamente si va a llegar lejos o no. Nadal responde que lo único que puede percibir es si es un buen peloteador. Que tenga éxito o no dependerá de muchos más factores: el entorno, su fortaleza mental etc… Al igual que en el trading, no sólo va a valer con tener una buena técnica, sino que hay que hacer muchas cosas bien, como controlar el riesgo o saber gestionar las emociones. Sólo hace falta que falle una de ellas para que no seamos consistentes.
– Bajo porcentaje de éxito. Debido a que hay que hacer muchas cosas bien, muy pocos son capaces de conseguir el éxito. De hecho, Nadal en su academia se centra en enseñar valores a nivel educacional, ya que la inmensa mayoría no va a conseguir éxito en el tenis profesional. En el trading es lo mismo, las estadísticas muestran que alrededor del 95% pierde en bolsa. Para formar parte del 5% hay que ser muy equilibrado en todas las competencias.
– No poner excusas. Toni Nadal, en la formación de Rafa, ha insistido mucho para que su sobrino no pusiera ningún tipo de excusa cuando las cosas salgan mal. En ese sentido, Nadal no se queja ante circunstancias adversas, sino que se intenta adaptar para poder enfrentarse a ellas de la mejor forma posible. En trading, echarle la culpa al mercado o al gurú de turno lo único que hace es debilitarnos. Lo que tenemos que hacer es ser responsables de nuestras decisiones independientemente de las circuntancias. Y si nos equivocamos, aprender del error.
– Aceptar el fallo. Sin duda, uno de los fuertes de Nadal es saber sobreponerse a sus fallos mucho mejor que sus rivales. Sabe que un fallo puntual es normal en la pista de tenis y es capaz de aislarse del punto anterior una vez ha terminado. En trading es lo mismo, el que la operación anterior haya acabado bien o mal no debe influirnos en la siguiente. El querer revancha ya sabemos a dónde nos lleva.
– Rutinas. Nadal comenta que las rutinas que sigue, como la mítica de los pantalones, le ayudan a mantenerse concentrado, porque el tenis es un deporte que mentalmente le exige mucho. En trading, establecer unos hábitos que luego se convertirán en rutinas también es positivo, ya que facilitarán el mantenerse centrado en lo que se está llevando a cabo. El paralelismo entre el tenis y el trading según mi punto de vista es muy grande.
Éstas son algunas de las conclusiones que he sacado del estudio de Rafa Nadal, pero quizás continúe en siguientes artículos, ya que me he dejado bastantes cosas en el tintero. Podría seguir escribiendo, pero se haría un artículo excesivamente extenso…