Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
Junto al informe de empleo no agrícola del viernes, el anuncio de política monetaria del Banco de Inglaterra es el segundo evento más importante de la semana. Al igual que el Banco de la Reserva de Australia, todo apunta a que el Banco de Inglaterra mantendré inalterada la política monetaria. Sólo hay una pequeña posibilidad de expansión cuantitativa, pero hay muchas probabilidades de que mejoren las proyecciones económicas. El Banco de Inglaterra tiene muchas razones para ser optimista. Están a la cabeza del mundo desarrollado en cuanto a vacunas, ya que más de la mitad de su población ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el COVID-19. Los nuevos casos diarios de virus han caído por debajo de los 2.000, lo que supone una tremenda mejora con respecto a los más de 68.000 casos notificados el 8 de enero. Junto con la baja incidencia de muertes, de dos dígitos a un solo dígito, la economía del Reino Unido está lista para reactivarse completamente poniendo fin a todas las restricciones el 21 de junio. Restaurantes, pubs y gimnasios llevan abiertos unas semanas y la economía ya está empezando a cosechar los beneficios, subiendo el índice PMI a su cota más alta de los últimos 89 meses. Cuando la economía del país se reactive por completo, veremos un impulso aún mayor del crecimiento.
Si bien el Banco de Inglaterra anticipó una recuperación, el impulso ha sido más fuerte de lo previsto debido a lo rápido que el Gobierno ha logrado vacunar a más de la mitad de la población. Combinado con la sólida recuperación en Estados Unidos y la inevitable reapertura de las naciones de la zona del euro, las perspectivas para el Reino Unido son ahora más claras y brillantes que en febrero, cuando se dieron a conocer sus últimas previsiones económicas. Además de elevar sus proyecciones económicas, también esperamos que el Banco de Inglaterra ponga los cimientos de una expansión cuantitativa en verano, lo que debería reavivar el repunte de la libra.
En realidad, es sorprendente que la libra esterlina haya subido sólo ligeramente frente al dólar estadounidense y el euro en la víspera de la reunión del Banco de Inglaterra, pero el posicionamiento tiene mucho que ver con esto. La libra ha mostrado una tendencia alcista durante los últimos seis meses y estas ganancias son un reflejo de la inclinación de los inversores hacia un Banco de Inglaterra menos prudente. No hay duda de que el banco central relajará su política monetaria antes que la Fed y hay muchas posibilidades de que también sean los primeros en subir los tipos de interés. Por lo tanto, a menos que el anuncio del banco central esté plagado de preocupaciones o se abstengan de elevar sus previsiones económicas, lo que es muy poco probable, el par GBP/USD debería subir tras el anuncio de política monetaria.
Nuestras previsiones alcistas para el par GBP/USD se ven reforzadas por los decepcionantes informes económicos de Estados Unidos de este miércoles. Para sorpresa de todos, la actividad del sector servicios estadounidense se expandió a un ritmo más lento en el mes de abril. Los economistas pronosticaron una subida del índice del sector servicios del ISM, pero éste bajó de 63,7 a 62,7 puntos debido al descenso de pedidos nuevos. Al igual que el sector manufacturero, el de servicios se ha visto afectado por la escasez y las limitaciones de suministro. El componente de empleo aumentó, lo que es alentador de cara al informe de empleo no agrícola del viernes. Según ADP, el crecimiento del empleo fue muy fuerte el mes pasado, ya que las empresas crearon 742.000 empleos en el sector privado. Sin embargo, al igual que en el caso del informe del ISM, los economistas esperaban más. El rendimiento mixto del dólar es señal de que a los inversores les preocupa que el empleo no agrícola también sea víctima de unas expectativas inalcanzables.
La revisión a la baja de los PMI de la eurozona tiene al euro sometido a una gran presión mientras las monedas vinculadas a las materias primas se disparan. Las cifras mejores de lo esperado del mercado laboral de Nueva Zelanda ayudaron a impulsar la moneda neozelandesa. El Banco de la Reserva de Nueva Zelanda ha advertido además de que, si es necesario, están "preparados para ajustar aún más las condiciones crediticias de la vivienda", si los precios no bajan. Las condiciones del mercado inmobiliario también son muy robustas en Australia, donde las licencias de obra aumentaron un 17% en marzo, considerablemente más rápido de lo que indicaban las previsiones que hablaban de un 3%. El par USD/CAD ha registrado nuevos máximos de tres años a pesar de la caída de los precios del petróleo.