Este artículo fue escrito en exclusiva para Investing.com
El dólar estadounidense se ha fortalecido materialmente en los últimos meses a medida que las tasas de interés se han disparado en EE.UU., y la Fed ha señalado subidas de tasas. El avance del dólar se ha estancado más recientemente y podría enfrentarse a un cambio de tendencia en las próximas semanas a medida que el euro gana fuerza.
El gráfico técnico muestra un patrón de cambio de tendencia muy ominoso, conocido como triple techo, y aunque no está grabado en piedra, el riesgo es que la caída del dólar sólo esté empezando, ya que también se enfrenta a una tendencia alcista a largo plazo que comenzó hace casi un año.
La debilidad técnica del dólar impulsada por el euro
El reciente retroceso del índice dólar se debe a la subida de las tasas en Europa, ya que los inversionistas empiezan a valorar el riesgo de que el BCE empiece a subir las tasas este año. Esto ha provocado un importante repunte del euro frente al dólar, que ha llevado a esta moneda a situarse en torno a 1.11 por dólar, frente a los 1.08 de principios de marzo.
Esto hizo que el índice del dólar encontrara una resistencia técnica extrema en torno a los 99.25 y un soporte en torno a los 97.75, lo que le permitió operar en un rango desde principios de marzo. Sin embargo, si el índice del dólar rompe por debajo de 97.75, probablemente se producirá una caída mucho mayor, especialmente frente al euro.
El índice del dólar podría caer hasta otro nivel de soporte, en torno a 96.30, lo que pondría en entredicho la tendencia alcista a largo plazo que se remonta a más de un año. Esto supondría un problema importante para el dólar, ya que la ruptura de esa tendencia alcista supondría un nuevo descenso del índice.
La mano de la Fed
Sería un gran golpe, sobre todo para la Fed y su lucha por domar la inflación. Un dólar más débil presionaría al alza los precios de las materias primas, encareciéndolas. Teniendo en cuenta que los efectos del fortalecimiento del dólar han sido menores en el costo de productos básicos como el petróleo y el cobre, un debilitamiento del dólar probablemente empeoraría toda la situación.
Sin embargo, el 6 de abril, cuando se publiquen las actas de la reunión de marzo del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), se dará una gran pista sobre la dirección futura. Estas actas darán a los inversionistas una idea de lo agresiva que puede ser la Reserva Federal en el futuro y de sus posibles planes para reducir su balance. Estas actas proporcionarán al mercado las pistas y la información necesarias para decidir si el dólar caerá más.
Sin embargo, si la Fed se muestra más agresiva de lo que se pensaba, el índice del dólar podría subir aún más. Porque el patrón de triple techo no puede confirmarse hasta que se rompa el soporte de 97.75. Si el índice del dólar se fortalece y supera la resistencia de 99.25, volverá a los niveles de marzo de 2020 por encima de 100.
Los próximos días serán cruciales para el índice del dólar y podrían ser costosos en caso de que el dólar sufra una caída significativa. Esto no podría llegar en peor momento, ya que la Fed podría perder una de las mayores herramientas en su lucha contra la inflación precisamente en el momento equivocado.