Están empezando a pasar cosas importantes en el mercado, algunas con claras repercusiones, otras más confusas. Por un lado, el bono europeo está repuntando, en tanto que el estadounidense no sigue cayendo (y esto es bueno para las bolsas). Por otro, el EUR/USD está cayendo por debajo de la zona de 1,2090, nivel que desde comienzos de año era un claro soporte (y esto es bueno para los índices europeos).
Al tiempo, el oro vuelve a tantear su zona de soporte en los 1.305 dólares, y esto abunda en unas bolsas alcistas. Tampoco el petróleo sigue presionando al alza, lo que se suele traducir en un buen comportamiento de la renta variable. Por último, los resultados de las principales tecnológicas en EE.UU están siendo espectaculares; ayer sorprendieron gratamente los de Apple (NASDAQ:AAPL), que ya viene subiendo con fuerza en el mercado after hours.
En fin, que parecen darse las circunstancias que permiten pensar en una evolución alcista para el conjunto de las bolsas. Sin embargo, los índices europeos no acaban de confirmar la ruptura de sus resistencias de referencia (principalmente, el Dax sobre los 12.660), y los estadounidenses no juegan a nada tendencial (sus gráficos nos dejan permanentemente huecos al alza o a la baja que son rellenados o cerrados en un plisplas).
Eso sí, lo que parece que no procede es ningún corto en la renta variable, pero merece la pena esperar para confirmar que el lado bueno sigue siendo el alcista.