La propensión al riesgo regresaba parcialmente en la sesión asiática ya que los temores sobre Grecia se desvanecieron levemente. Teniendo en cuenta la incertidumbre sobre el futuro en Europa, se sospecha que la reciente recuperación en los mercados de divisas es más una operación de consolidación que un regreso a las expectativas. El par EUR/USD fluctuaba en el margen entre 1.2736 y 1.2750, mientras que el USD/JPY caía hasta 80.26 con escaso volumen de operaciones. En una sesión moderada, los índices regionales asiáticos se comportaron de forma firme con el Nikkei subiendo un +0.77%, el Hang Seng +0.85% y el compuesto de Shanghai subía más, alcanzando el +1.36%.
El AUD/USD recuperaba los 0.9962 desde 0.9908, ya que las expectativas de inflación del consumidor para mayo se situaba en el 3.1% frente al 3.3% de abril. En Singapur, el PIB se quedaban en el 1.6% interanual frente al 1.8% anterior, continuando la tendencia de debilidad tras la espera de los datos de crecimiento regional. En cuanto a Europa, continúa la presión sobre el sector bancario griego. Ayer, se informaba que el BCE ha frenado la liquidez que ofrecía a los bancos griegos que considera insolventes. Una fuente no identificada de un banco central de la eurozona declaraba que “si la recapitalización no estuviera en su momento, el BCE abandonaría las operaciones de política monetaria”. No se publicaron los nombres de los bancos ni las cifras, y esto hizo que los mercados anticiparan una segunda fase en la crisis financiera.
El riesgo de contagio se refleja por los mayores rendimientos y por los precios más altos en el CDS (credit default swap) en Italia y España, haciendo que los activos de riesgo disminuyeran en todos los ámbitos. El oro caía hasta 1526 dólares mientras que el crudo (WTI) alcanzaba la barrera de los 91.81 dólares. Mario Draghi reiteraba de nuevo que el BCE ya ha hecho lo suficiente y que ahora estaba fuera de su competencia. “Quiero declarar que nuestra preferencia es que Grecia continúe en la zona euro”, pero continuó diciendo que “Dado que el tratado no prevé nada sobre una salida, no quiere decir que sea el BCE quien tenga que decidir”. Hoy tenemos una agenda europea sin muchos acontecimientos (algunos países tienen el día festivo) y habrá que estar atentos a las operaciones que se realicen en España a lo largo de la mañana, publicándose el PIB del primer trimestre y una emisión de bonos de 2250 millones de euros.