Stefan Rondorf, Director, Global Capital Markets & Thematic Research de Allianz (DE:ALVG) Global Investors:
“En las últimas semanas ha habido una reducción de los potenciales riesgos bajistas: la pandemia se propaga más lentamente gracias a las duras restricciones; los bancos centrales han reducido el peligro de conmociones descontroladas en el sistema financiero, y el riesgo de un desplome total del precio del petróleo también se ha moderado. Esto podría ofrecer oportunidades en deuda corporativa. Las perspectivas económicas y de beneficios también han empezado a ser un poco más realistas, aunque seguimos considerando bastante optimista la previsión del Índice de referencia estadounidense S&P 500 sobre un retroceso de los beneficios de en torno al 10% en todo el año. Sin embargo, la fuerte recuperación del mercado de valores ahora parece reflejar un escenario muy positivo con respecto a la evolución de la pandemia: apenas se identifica un colchón frente a los riesgos en caso de retrocesos en la contención del virus o de una normalización más lenta de la actividad económica. Como gestores activos, tenemos la capacidad de proceder de forma muy selectiva al invertir en renta variable”.
Claves de la próxima semana
- Los números de infectados y de muertes debido a la pandemia del coronavirus empiezan a ser menos alarmantes, ya que comienzan a moverse en buena dirección, pero aún deben vigilarse. En el ámbito político, la semana que viene se prestará atención a las declaraciones de diversos gobiernos sobre cuándo y cómo deberían empezar a darse de forma cautelosa los primeros pasos hacia una normalización de la vida pública, después de que esta semana algunos gobiernos como España, Italia o Estados Unidos ya estén planeando algunas medidas de relajación a las restricciones. Habrá varios factores que podrán contribuir con la “desescalada”, como por ejemplo, la disponibilidad de tests para detectar la presencia del virus, de equipos de protección y de mascarillas. La tasa de contagio del virus, es decir, el número de personas a las que cada infectado transmite la enfermedad, también debería de ser un factor determinante. Asimismo, se prestará atención a los éxitos o fracasos que China se encuentre en el camino hacia la normalización de su economía.
- En el plano macroeconómico, el jueves las estimaciones preliminares del Índice de Gestores de Compras de todo el mundo, se convertirán en el asunto principal a tratar globalmente. Después de que las cifras totales de marzo ya señalaran un deterioro récord de la actividad económica, se prevé que los datos de abril reflejen el pleno impacto que las restricciones iniciales establecidas dejan como resultado. En este sentido, hay que tener en cuenta que el fin de estas encuestas es mostrar las variaciones de la actividad en comparación con el mes anterior, por lo que las posibles mejoras o deterioros deben contemplarse en el contexto de unos datos ya débiles de la encuesta del mes anterior. A lo largo de la semana, está prevista la publicación de otros indicadores de confianza: el Índice Ifo de Confianza Empresarial Alemán presentará sus datos el viernes y el Índice de Confianza del Consumidor de la Unión Europea y las perspectivas de producción de las empresas francesas, el miércoles. El viernes en EE.UU. se conocerán también los pedidos de bienes duraderos. Algunos de estos datos podrían registrar unos retrocesos sin precedentes
Gráfico de la semana:
