Hablo con Adrián M. operador treintañero en un banco importante. Hablamos de lo humano y de lo divino. Incluso del más allá. Tras el precalentamiento, entro en el asunto: "¿Qué método analítico utilizáis en vuestro banco a la hora de decidir las inversiones? ¿Valores, sectores, otras preferencias? ¿Países, regiones? ¿Multifactores?", le pregunto. "A mí, como al resto de compañeros de mesa no nos pagan para pensar. Tampoco asistimos a la reunión de los analistas antes de la apertura. Solo ejecutamos las órdenes que nos envía el sistema operativo. Ni siquiera eso, porque las máquinas lo hacen todo (o casi). Hay que estar muy atentos. Nada más y nada menos, porque todo se desarrolla de manera muy rápida. Es otra máquina la que soporta el control de la velocidad de la anterior y, luego, un ordenador central", me dice tan tranquilo. "En concreto, yo soy matemático, No se nada de Bolsa. Sólo que los algoritmos se cruzan unos con otros, aunque en la mayoría de las ocasiones van cogidos de la mano, porque un algoritmo es, precisamente, eso, un conjunto ordenado de operaciones sistemáticas que permite hacer un cálculo y hallar la solución de un tipo de problemas", añade.
Ya he escrito de la avaricia desmedida de los banqueros, también y, principalmente, los ordenadores potentes. Ordenadores que pelean unos contra otros, alimentados con algoritmos de última generación. Las Bolsas se han convertido en un enorme casino de algoritmos contra algoritmos y de nuevos encajes matemáticos. A veces, la liquidación desordenada de posiciones en ETF Short VIX (SVXY), fondos que juegan en contra de los incrementos de la volatilidad, cogen con el pie cambiado a los Nomura y Crédit Suisse y generado pérdidas mil millonarias. Movimientos replicados por ordenadores, que compran y venden con programas informáticos, elevando aún más la volatilidad.
En el Gran Casino de la Bolsa proliferan técnicas de trading de alta frecuencia (High Frecuency Trading), algoritmos automáticos de compra/venta de activos o técnicas de control del riesgo de las carteras asociadas precisamente a la volatilidad. En los últimos meses hemos asistido a varios procesos correctivos de alta intensidad y rápida ejecución (flash crash). Lo dicho, los ETF, ETN del VIX y la madre que los parió me van a echar de la Bolsa. Como a muchos.
Seguro que ha oído hablar en los últimos años del trading de alta frecuencia (high frequency trading HFT). La negociación de alta frecuencia, también conocida en el ámbito financiero por su nombre en inglés high-frequency trading o por sus siglas HFT, es un tipo de negociación que se lleva a cabo en los mercados financieros utilizando intensamente herramientas tecnológicas sofisticadas para obtener información del mercado y en función de la misma intercambiar valores financieros tales como activos u opciones. Se caracteriza por varios elementos distintivos:
- Es altamente cuantitativa ya que emplea algoritmos informáticos para analizar datos del mercado e implementar estrategias de negociación.
- Cada posición de inversión se mantiene solo durante muy breves períodos de tiempo, para rápidamente ejecutar la posición y comprar o vender, según el caso, el activo de que se trate. En ocasiones esto se lleva a cabo miles, o incluso decenas de miles de veces al día. Los períodos de tiempo durante los que se mantienen las posiciones pueden ser de solo fracciones de segundo.
- Al final del día de operaciones, no se mantienen posiciones de inversión abiertas, esto es, se saldan todas las operaciones llevadas a cabo.
- Suele llevarse a cabo por importantes salas de mercado, normalmente de fondos de inversión o bancos de inversión con carteras con gran volumen y muy diversificadas.
- Es un tipo de negociación muy sensible a la velocidad de procesamiento del mercado y al propio acceso al mercado.
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El high-frequency trading lleva teniendo lugar al menos desde 1999, una vez que la Securities and Exchange Commission de Estados Unidos (SEC) autorizó los intercambios electrónicos en 1998. A comienzos del siglo XXI las operaciones HFT requerían un período de ejecución de varios segundos, mientras que para 2010 este tiempo había disminuido hasta los milisegundos, e incluso microsegundos. Se trata de un tipo de negociación en los mercados financieros que se ha mantenido escasamente conocida fuera del sector financiero desde su creación, apareciendo por primera vez en un medio generalista en julio de 2009.
En los primeros 2000, la negociación de alta frecuencia significaba menos del 10 % del total de órdenes sobre activos, pero esta proporción pronto comenzó a crecer. De acuerdo con el NYSE, la negociación de alta frecuencia creció alrededor de un 164 % entre 2005 y 2009. En el primer trimestre de 2009, el valor total de activos gestionados por hedge funds a través de estrategias de high-frequency trading representaba 141.000 millones, un 21% por debajo de su máximo alcanzado antes de que vinieran los peores momentos de la crisis. Las estrategias de alta frecuencia tuvieron éxito por primera vez gracias a Renaissance Technologies. -
En los Estados Unidos, las empresas de negociación de alta frecuencia representan el 2% de las aproximadamente 20.000 firmas que operan, pero alrededor del 73% del volumen de todas las órdenes sobre equity.