Los futuros del crudo WTI cerraron el miércoles con una fuerte caída antes de una reunión clave de la OPEP, en la que se espera que se mantengan los objetivos de producción del grupo. Por su parte, datos débiles de la economía estadounidense alimentaron la desconfianza en el mercado ante una menor demanda, lo que presionó al barril a la baja.
En Nueva York, el petróleo para entrega en julio cayó cerca de un 1% a niveles 82,62 dólares por barril. En estos momentos, el crudo muestra una fuerte presión vendedora que podría llevar al barril en busca del soporte de corto plazo en la zona de los 75 dólares por barril.