Las sociedades cotizadas de inversión inmobiliaria (socimis) han visto cómo el Gobierno ha dado un paso adelante en la materia fiscal de este sector. Hasta ahora no tenían que abonar el Impuesto de Sociedades (IS) siempre y cuando cumplieran unos requisitos:
- Que el capital social mínimo sea de 5 millones.
- Que se reparta un mínimo del 80% del beneficio obtenido en el alquiler a través de dividendos.
- Que un mínimo del 80% del valor de los activos en inmuebles urbanos deben estar arrendados durante tres años.
La idea es que con la nueva fiscalidad han de repartir como mínimo el 80% de los dividendos entre sus accionistas y sería sobre el 20% donde sí entraría en escena el IS con un cargo del 15%. Así pues, la novedad sería que las socimis tendrían que tributar por el 15% sobre aquella porción del beneficio que no repartan vía dividendo.
La realidad es que se trata de una novedad que no tiene ningún sentido, más que nada porque no afectará a las grandes compañías, sólo a las pequeñas. ¿Y esto por qué? Porque entre las 8 mayores socimis hay 6 que reparten el 100% de los beneficios, de manera que éste cambio de fiscalidad no les afectará lo más mínimo. Por tanto, serán principalmente las socimis más pequeñas las que tengan que soportar la nueva carga fiscal y aun así se espera recaudar unos 25 millones de euros en 2022.
Esta nueva medida impulsada por Unidas Podemos queda claro que se trata de una medida simbólica, de cara a la galería, que se ha querido vender como un éxito y que su efectividad recaudatoria será mínima y que es un sinsentido ya que las grandes socimis quedan fuera del nuevo marco regulatorio.
Vamos a ver dos socimis y qué posibles ideas operativas se podrían llevar a cabo.
Colonial (MC:COL)
Su beneficio neto se redujo bastante en los nueve primeros meses del año, aunque el resultado recurrente aumentó un 8% gracias al ahorro en gastos financieros. Comparado con los 393 millones que obtuvo el año pasado, la compañía ha reducido un 98% su beneficio neto.
El soporte que formó el pasado mes de marzo ha sido tocado ha finales del mes de octubre con éxito, ya que impidió más recortes y está propiciando un rebote al alza que de momento llegó a un +35,40%.
Se presentan 2 ideas operativas:
- Comprar en 5,98 euros.
- Comprar si rompe por arriba los 9,075 euros.
Arima
Registró un beneficio neto de 2,4 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un descenso del 84% respecto al mismo periodo del año anterior, básicamente por el incremento de los costes generales y los financieros. Mantiene una posición de caja de 144 millones de euros con el que espera poder hacer frente a cualquier imprevisto.
También formó un fuerte soporte el pasado mes de marzo y fue tocado en el presente mes de noviembre, logrando esquivar males mayores y rebotando al alza de momento un +12,63%.
Hay 2 posibles ideas operativas:
- Comprar en 7,78 euros.
- Comprar si rompe por arriba los 9,50 euros.