Cada dos o tres semanas me encuentro con un trader o inversor sentado frente a la pantalla, sin poder moverse porque está observando intensamente los ticks de una acción, divisa o materia prima.
Las consecuencias de este tipo de trading en el día son varias, desde gestionar una operación/inversión a pequeña escala al estrés físico y mental. Por suerte, como analicé en el artículo "Swing para ganar", existe una forma mejor.
Otro problema que causa frustración y pérdidas a los inversores es que se centran únicamente en la acción, divisa o materia prima que tienen a mano. La razón por la que muchos traders e inversores, ya sea al principio o en el transcurso del tiempo, terminan cayendo en las trampas de utilizar el "modelo de un único factor" generalmente tiene que ver con no comprender bien las correlaciones dentro de los activos y entre los activos.
Ahora podría escribir un estudio de 10 páginas sobre la correlación estadística histórica de cualquier clase de activos, pero como soy un trader y mi trabajo es hacer dinero en los mercados y no formular teorías sobre estos, me abstendré de hacerlo.
No obstante, a lo que me refiero es que las correlaciones entre, por ejemplo, bonos y acciones, el índice dólar y varias materias primas, y en general dentro y entre clases de activos, cambia con el paso del tiempo a través de las diferentes fases de los ciclos económicos y los diferentes apuntalamientos estructurales del mercado.
En otras palabras, si su libro de texto solo decía que las acciones suben cuando los bonos caen, no solo es absolutamente incorrecto (si analizamos la correlación entre el S&P 500 y los precios de los bonos del Tesoro de EE.UU. a 10 años de 2009 a 2013), también sería muy terco apoyarse en eso durante mucho tiempo.
En los mercados, como en la vida, las cosas cambian, al igual que el coeficiente de correlación.
Como el trading se trata de mantener la mente abierta y gestionar el riesgo de las posiciones, me gusta utilizar una correlación entre las clases de activos con un modelo ascendente.
Sí, vivimos en un mundo de mercados financieros cada vez más complejos y correlacionados a nivel mundial, pero poder entender las fuerzas más importantes sigue siendo fundamental. Entonces, en lugar de recibir información únicamente, siempre hay que intentar entender cuáles son las políticas monetarias actuales de los bancos centrales más importantes.
Manteniendo siempre el panorama general en mente y centrándonos en este, utilizo varios gráficos de activos múltiples para seguir las correlaciones dentro y entre las clases de activos.
Esto puede realizarse con gráficos diarios, semanales e incluso intradía, para aquellos que prefieren hacerlo de este modo. En el gráfico a continuación superpuse el precio del oro, el índice del dólar, acciones, bonos y más, todo en un único gráfico.
Como las correlaciones cambian, la representación visual ayuda a detectar esos cambios y hacen que mis operaciones fluyan, en lugar de dejarme estancado. Otra forma de seguir las correlaciones es utilizar gráficos de ratios, tema que dejo para otro día.