El índice Euro Stoxx 50 ha caído un 14% desde finales de noviembre, dado que el sentimiento se ha debilitado con un aumento de la incertidumbre sobre la transformación de China de una economía doméstica a una economía de consumo.
La caída, sin embargo, es una reacción exagerada y no está justificada por los datos macro de Estados Unidos y Europa (especialmente si nos centramos en los datos de paro o los datos de PMI).
Se trata de una venta masiva de liquidez. Parece que la contracción se está quedando sin fuerza y estamos navegando hacia una reversión a la media. Históricamente, ha sido rentable apostar por una reversión a la media tras cuatro sesiones de fuertes caídas.
Gestión de la estrategia:
El mercado de acciones chino ha visto de nuevo cómo las autoridades ponían límites a los pronunciados descensos, ante unos datos macro mucho más débiles de lo esperado, así como consecuencia de nuevos riesgos geopolíticos.