Probablemente no era lo que el presidente Donald Trump esperaba oír de su asesor de salud, pero el especialista en pandemias de la Casa Blanca, Anthony Fauci, ha dejado claro que los estados de Estados Unidos no deberían apresurarse a sacar sus economías del confinamiento del Covid-19 sin marcar las suficientes casillas de las directrices que se les han dado. En el contexto del mercado petrolero, esto pone concretamente a la gasolina en un lugar incómodo.
Los futuros de la gasolina RBOB del mercado de Nueva York han duplicado su valor en las últimas dos semanas, manteniendo el ritmo del repunte del crudo. Desde que registrara mínimos en 47,4 centavos durante la semana que concluía el 17 de abril, la gasolina alcanzaba máximos de dos meses en 98,2 centavos el lunes, antes de revertir su rumbo. El testimonio de Fauci ante el Senado del martes podría frenar cualquier subida del combustible.
Para una orientación inmediata, por supuesto, está el conjunto de datos semanales de la Administración de Información Energética que se publica a las 16:30 horas (CET), que mostrará si las reservas de gasolina descendieron efectivamente en 2,2 millones de barriles la semana pasada tras el descenso de 3,2 millones de la semana anterior. El informe semanal de reservas del grupo comercial Instituto Americano del Petróleo, publicado antes del informe de la Administración de Información Energética, ha indicado un descenso de 1,9 millones de barriles de gasolina, lo que sugiere que los analistas podrían no haberse equivocado demasiado en sus estimaciones.
Sin embargo, independientemente de lo que diga la Administración de Información Energética, las palabras de Fauci podrían tener una mayor incidencia en la percepción del mercado del rumbo de la gasolina de cara al futuro.
La única esperanza del mercado de combustible: La gasolina
¿Por qué? Como ya hay tantos productos combustibles disponibles, el único que tiene la oportunidad de mantener el repunte del petróleo en marcha es la gasolina. A pesar de que la mayoría de los 50 estados de Estados Unidos han reactivado sus economías, la actividad de camiones apenas ha repuntado; el transporte público sigue siendo infrautilizado, ya que muchas personas continúan trabajando desde casa y los vuelos no esenciales no han despegado. En tales circunstancias, la única fuente de demanda puede provenir de la conducción.
Por lo tanto, la advertencia de Fauci contra una reapertura apresurada podría tener un profundo impacto en la gasolina, particularmente sumado a las restricciones en estados como California, Nueva York y Pensilvania que han sido mucho más lentos que otros en el levantamiento del confinamiento. Una nueva oleada de infecciones de COVID-19 en China, Corea del Sur y Alemania ha reforzado los temores de que un fenómeno similar pueda darse en Estados Unidos.
Para añadir seriedad a su advertencia, Fauci ha dicho que los niños podrían ser particularmente vulnerables si las escuelas reabrieran sin las protecciones adecuadas, especialmente tras una oleada de infecciones que involucran a víctimas muy jóvenes últimamente. Casi 57 millones de estudiantes asistieron a los centros educativos de Primaria y Secundaria en Estados Unidos el año pasado. Estadísticamente, los estudiantes representan casi una quinta parte de la población estadounidense.
Mejor no ser arrogantes con el virus: Fauci
Sin embargo, lo que es más importante para los estudiantes es que, hasta que se reanuden las clases habituales en las aulas, el equilibrio entre el trabajo y la vida de sus padres permanece en el limbo, lo que complica los planes de reapertura de los gobernadores en sus estados.
"No lo sabemos todo sobre este virus", decía Fauci el martes. "Creo que es mejor tener cuidado de no ser arrogante al pensar que los niños son completamente inmunes a los efectos nocivos" del COVID-19.
Para los fondos de cobertura que se han posicionado en largo en la gasolina, las complicaciones médicas que impiden la rápida reapertura esperada por la Administración Trump añaden un nuevo nivel de riesgo.
"Es el momento que ha elegido el doctor Fauci para sus declaraciones, más que su contenido, lo que ha asustado a los mercados", explica Jeffrey Halley, analista senior de mercados de OANDA, en Nueva York.
"Las declaraciones llegan... tras una carrera alcista en activos "de riesgo" en la que los mercados han estado ignorando sin contemplaciones varias advertencias similares durante las últimas dos semanas. Eso sugiere que, por ahora, la mayor parte de la recuperación tras el pico mundial del virus podría incorporare a los mercados financieros y que estemos entrando en un período de consolidación lateral. Los inversores deberían tener cuidado si no quieren ser golpeados por los vaivenes diarios de la confianza global durante el resto de la semana".
Los viajes por carretera en verano no están totalmente descartados
Pero, ¿cuál es el panorama a largo plazo para la gasolina?
GasBuddy, que ha estado rastreando los viajes estivales de los estadounidenses durante años, predice una caída del 44% de los viajes desde el Día de los Caídos el 25 de mayo hasta el Día del Trabajo, que cae el 7 de septiembre.
Sin embargo, lo bueno es que el 31% de los que contestaron su encuesta anual de viajes de verano dijeron que planeaban hacer al menos un viaje este verano.
"Por supuesto, la gran caída de los viajes de este verano está completamente ligada al COVID-19", dice GasBuddy en una entrada de un blog publicada este martes.
"El 72% dijo que el virus ha impactado directamente en sus planes de viajes de verano: realizar menos viajes por carretera de los previstos anteriormente (48%), cancelar viajes que requieren vuelos (36%), y hacer viajes más cortos (24%)."
Los precios bajos del gas están jugando un papel importante, pues el promedio nacional actualmente se sitúa en más de 1 dólar por galón menos que el año pasado. En el caso de aquéllos que planean salir a la carretera, el 36% ha dicho que los precios bajos son un factor importante en su decisión, frente al escaso 6% que decía lo mismo el año anterior y al 5% de 2018.
Los datos de los consumidores estadounidenses publicados el martes han indicado que los precios de la gasolina se desplomaron el mes pasado, pero los precios de los alimentos alcanzaron máximos de casi 50 años, lo que refleja las formas de vida actuales.
El craqueo de gasolina sigue siendo decente
Aparte del incipiente crecimiento de la demanda, otra razón de la fortaleza de los precios de la gasolina estas últimas dos semanas fueron los márgenes bastante decentes de refinamiento, o craqueo, del combustible de motor con respecto al crudo. A partir de este martes, los refinadores estaban recibiendo alrededor de 14 dólares por barril para el llamado craqueo de gasolina.
La Administración de Información Energética, en sus Previsiones Energéticas a corto plazo publicadas el martes, decía que cree que el consumo de gasolina para motor de Estados Unidos disminuirá en 8,6 millones de barriles al día en el primer trimestre hasta una media de 7,0 millones en el segundo trimestre, antes de aumentar gradualmente hasta 8,7 millones en el segundo semestre.
De cara a todo 2020, la Administración de Información Energética prevé que el consumo de gasolina para motor de Estados Unidos ascenderá a 8,3 millones de barriles al día, lo que representa una disminución del 11% con respecto a 2019, mientras que el consumo de combustible para aviones y combustible destilado caerá un 25% y un 10%, respectivamente, durante el mismo período.