El principal acontecimiento de la noche de hoy ha sido la rebaja de la calificación de la deuda española a corto y largo plazo realizada por S&P, la cual se dio a conocer cerca del cierre de las sesiones bursátiles de EE.UU. La agencia de calificación ha rebajado el valor crediticio a solo un punto por encima del bono basura en BBB-, desde el anterior BBB+ con perspectiva negativa. En cuanto a los valores a corto plazo, el país se encuentra ahora en el nivel A-3, un paso por debajo del A-2. La agencia S&P declaraba que “la perspectiva negativa en la calificación a largo plazo refleja nuestra visión sobre los importantes riesgos en el crecimiento económico español y sobre la ejecución de su presupuesto, así como la falta de una dirección clara en la política de la eurozona”.
La agencia también advirtió de que “la profundización en la recesión económica va a limitar las opciones políticas del Gobierno español”, lo que posiblemente indica que S&P prevé una probable petición formal de rescate por parte del gobierno de España. Todo ello junto al panorama sombrío de la economía china hicieron que los mercados asiáticos cerraran en rojo. El índice del Compuesto de Shanghái caía un 0.68%, frenando las dos sesiones de ganancias y volviendo a colocarse por debajo del EMA a 55 días, mientras que el Hang Seng de Hong Kong bajó ligeramente hasta 20915.87.
Ayer, los pedidos de maquinaria en Japón resultaron ser peores de lo esperado, quedándose en -3.3% frente a lo previsto del -2.5% en términos mensuales, y llevaron a que el Nikkei 225 perdiera un 0.57%. Las cifras de desempleo en Australia fueron en general bastante optimistas, ya que el número de ocupaciones subió en 14500, casi cuatro veces la cifra prevista de 3800. Sin embargo, la tasa de desempleo creció, alcanzando el nivel más alto desde diciembre de 2011. Este incremento se debe principalmente a un aumento en la búsqueda de empleo de la población activa, lo que indica una caída en la confianza del consumidor. Por ello, el ASX 200 cayó un 0.16%, menos que los índices bursátiles homólogos del Asia Pacífica, hasta los 4483.53 durante la noche de hoy.
El dólar australiano ha seguido apreciándose frente a todas las monedas del G10, experimentando las mayores ganancias frente a la corona sueca (+0.53%), el euro (+0.50%) y la corona danesa (+0.49%). El lunes, el par EUR/AUD rompía por debajo del UBB a 20 días, tras atravesar el nivel de resistencia el viernes y cerrar por encima de ese nivel. Desde entonces, la moneda ha vuelto a bajar y actualmente ronda por encima de la media móvil del Bollinger a 20 días en 1.2517. Si el par sigue bajando debido al empeoramiento de la confianza de los inversores, los primeros niveles de soporte se situarán en 1.2444 y 1.2331.
De vuelta a Europa, los datos del IPC de los países miembros variaron conforme a las peores perspectivas previstas, ya que el IPC alemán perdió quedándose en el 0.0% intermensual, y los IPC franceses y españoles decepcionaron al colocarse en -0.3% (frente al 0.1%) y 1.0% (frente al 1.1%) respectivamente. En una semana de ganancias, el dólar sigue repuntando frente a la mayoría de sus homólogos, ya que en los últimos cinco días ha subido un 1.77% frente a la corona sueca, un 1.11% frente al euro y un 1.10% frente a la libra esterlina.