El USD siguió dominando los mercados de divisas. El billete verde se ha beneficiado de los puntos de tensión agravados en otras monedas. Ya sea tensiones comerciales, sanciones, las preocupaciones vinculadas al Brexit, la política europea, la exposición a los precios del petróleo o los tipos de interés, etc., el USD parece ser el refugio de elección. Incluso dentro de la batalla comercial entre EE.UU. y China los mercados están a favor de un resultado positivo para los EE.UU. Mientras que, a nivel nacional, los EE. UU. siguen proporcionando a los inversores razones para estar satisfechos con las perspectivas del USD.
El informe laboral de Estados Unidos del viernes fue sólido, ya que el desempleo cayó al 3,9% y el crecimiento de los salarios subió un 2,7%. Los rendimientos a 10 años de los bonos de EE.UU. saltaron al 3 %, lo que brinda a los buscadores de rendimientos un diferencial significativo dentro del G-10 (aunque hoy se observaron fuertes retrocesos). En otra parte, los datos de Estados Unidos han reportado, como se esperaba, más aceleraciones económicas. Además, el empleo de julio en la industria manufacturera indica que no hay ningún efecto negativo de las actividades proteccionistas de los EE.UU.
Si bien la Reserva Federal continuó reiterando su mensaje de un aumento progresivo de las tasas, hay razones cada vez mayores para un ciclo de alzas más agresivo. Especialmente teniendo en cuenta que el ajuste al alza considerable en los ingresos personales debería respaldar un mayor consumo. Jamie Dimon, CEO de JPMorgan Chase & Co (NYSE:JPM) sugirió durante el fin de semana que el rendimiento de los bonos a 10 años podría alcanzar el 5 %.
Seguimos siendo optimistas sobre las perspectivas del USD a corto plazo ya que otras monedas del G-10 están luchando contra cuestiones idiosincrásicas. Nuestro punto de vista es más negativo con respecto al Cable dado que las perspectivas del Brexit siguen siendo muy oscuras. Es difícil imaginar, tras los comentarios de Carney de la semana pasada, que el Banco de Inglaterra llevara a cabo un ajuste agresivo con el riesgo creciente que rodea al Brexit.