Claras subidas en las bolsas europeas, que han ido incrementándose tras la apertura, a pesar de que no tenemos ningún factor alcista destacable.
La subida de los futuros estadounidenses pueden explicar en parte las subidas superiores al 1% que estamos viendo en todos los índices europeos.
También tenemos un buen comportamiento de los bancos y de las empresas de recursos básicos (frente a las automovilísticas, las más bajistas a estas horas). Aunque seguramente, el elemento más importante que tenemos sobre la mesa lo encontramos en el hecho de que ayer fue un día de caídas y hoy toca recuperarse.
La mayoría de los movimientos que estamos viendo en las últimas semanas parecen formar parte de un escenario marcado por la indefinición y falta de tendencia, y por la concatenación de días alcistas y bajistas, que nos llevan siempre al mismo punto.
No es casualidad que en las últimas cuatro semanas, las bolsas europeas hayan cotizado en un rango inferior al 5% entre los máximos y los mínimos. El punto intermedio del rango es el nivel más visitado y parece ejercer un magnetismo muy poderoso. Nos referimos a los 10.500 puntos del Dax, los 3.000 del Euro Stoxx 50 o los 8.800 del Ibex.
En Wall Street las cosas han cambiado un poco durante la última semana. Los índices, en lugar de regresar automáticamente al punto medio de su rango del último mes, se han acercado al soporte. Es decir: en los últimos días, Nueva York ha bajado un escalón respecto al comportamiento de las bolsas europeas. Probablemente, al última apreciación del dólar explica en gran medida este hecho.
El S&P 500 terminó ayer con caídas del 0,3%, similares a las del Nasdaq.
Los resultados que presentó Bank of America (NYSE:BAC) fueron positivos, pero no así los de IBM (NYSE:IBM) o Visa (NYSE:V). Gustaron especialmente los que presentó Netflix (NASDAQ:NFLX) al cierre.
El vicepresidente de la Reserva Federal, Stanley Fischer, tuvo ayer una comparecencia pública en la que manifestó que los tipos de interés seguirán bajos un largo periodo de tiempo, e invitó al Gobierno de Estados Unidos a incrementar el gasto público.
En Asia, hemos tenido subidas del Nikkei del 0,38%.
Repasando la agenda de datos del día, hemos conocido que el IPC del mes de septiembre en Reino Unido ha subido un 0,2%, cuando se esperaba una décima menos. En términos interanuales, el IPC sube un 1%, de nuevo, una décima más de lo previsto. La inflación subyacente interanual también sube una décima más de lo esperado, hasta el 1,5%.
Esta tarde a las 14:30 se publicará el IPC de septiembre en EE.UU., y a las 16:00, el índice NAHB de viviendas en octubre.
En resultados empresariales, conoceremos los de Goldman Sachs (NYSE:GS), BlackRock (NYSE:BLK), Yahoo! (NASDAQ:YHOO), Johnson & Johnson (NYSE:JNJ), Harley Davidson (NYSE:HOG), Philip Morris (NYSE:PM) e Intel (NASDAQ:INTC).
Recordamos que esta es la sexta campaña trimestral de presentación de resultados en EE.UU. en la que se espera una caída del beneficio, lo que ayuda a que haya sorpresas positivas.
En Europa, hemos tenido un profit warning de Ryanair (LON:RYA) y otro de Continental (DE:CONG). Danone (PA:DANO) ha presentado unas ventas que no han gustado, todo lo contrario que las de Burberry (LON:BRBY).
En divisas, el EUR/USD sube y recupera la cota de 1,10, tras los datos de inflación publicado en Europa ayer.
El petróleo, por su parte, repite los mismos niveles que ayer, tras recuperarse desde la tarde de ayer.
En resumen: todo sigue igual en las bolsas europeas, que parecen haber caído en una rutina en la que pivotan sobre el mismo nivel, alternando días verdes con días rojos. Ninguno de los catalizadores parciales (Deutsche Bank (DE:DBKGn), resultados empresariales, petróleo, yuan, dólar), es capaz de sacarlas del movimiento lateral en que ya llevan cuatro semanas. El día que se rompan los rangos será previsible que veamos un movimiento rápido de varios centenares de puntos, entrando así en un nuevo escenario.