Las actuales tensiones geopolíticas con la incertidumbre en torno a Corea del Norte pueden influir en la evolución de los precios del Yen. Hasta la fecha, Japón se ha beneficiado de precios bajos en materias primas, petróleo y de una moneda débil, pero si dichos conflictos van a más, las materias primas y en particular el petróleo encarecerían sus precios, el mercado exportador de Japón se vería claramente perjudicado y, por ende, condicionaría la evolución de los precios del yen.
Indirectamente, esto podría influir también a mercados directos, como China y EE.UU., que son los países con mayor superávit del mundo y que las “buenas relaciones” que existen entre ellos ha llevado a China a ser uno de los países con mayores reservas de bonos en EE.UU.
EE.UU. se llega a plantear dejar de comercializar con países que tengan negocios y acuerdos con Corea del Norte, como China, Rusia, India, etc. Si ocurriese esto, sería muy perjudicial para el PIB de dichos países.
Desde el punto de vista técnico, consolidación alcista de medio plazo con una formación chartista de Banderín. Los precios bajan a buscar apoyo en el soporte de referencia de corto y medio plazo (118,00). Si dicha formación hace su función y cumple el escenario más probable, desde el punto de vista técnico, los precios deberían atacar la resistencia de referencia que calculo que podría coincidir con el nivel de los precios de la media de 200 sesiones (112,40 actualmente) cuando llegue a ese momento.
Los indicadores no reflejan debilidad, pero sí un escenario probable de aumento de volumen de contratación y, por consiguiente, aumento de la volatilidad. La clave pasará por ver cuál es la evolución de los precios en próximas semanas y si conseguirán aguantar el soporte mencionado anteriormente.
