El oro está en el centro de un cambio histórico apoyado por una sucesión de factores clave que para algunos pueden abrir una brecha alcista con muy pocos precedentes.
Diversos expertos (Shroders, Credit Mutuel Asset Management, Commerzbank (ETR:CBKG), BCE Research) ya están hablando de que una tormenta perfecta se está posando sobre el valor refugio por excelencia y que esta puede incluso catapultarla a competir con alguno de los mercados alcistas más grandes y desenfrenados de toda la historia.
En lo que va de 2024 la onza ya ha avanzado cerca de un 19,58%, avivado por una acumulación de factores sin precedentes (recortes de tipos, conflictos geopolíticos, giro en los bancos centrales sobre las reservas, etc.) que se combinan hoy para forjar un camino hacia un impulso mundial sostenido del oro.
En la opinión de los expertos, esto podría desencadenar "uno de los mercados alcistas más fuertes desde que el presidente Nixon cerró la puerta al oro en noviembre de 1971, poniendo fin a la convertibilidad del dólar estadounidense en oro".
Es decir, cuando la onza de oro pasó de $35 a $850 (+2328,57%) en sólo nueve años (1971-1980). Algo parecido podría estar a punto de ocurrir.
1- El factor geopolítico ha llevado a los bancos centrales de todo el mundo a comprar enormes cantidades de oro.
2- La tensa dinámica actual de poder establecido (EEUU y Europa) poder emergente (BRICS+).
3- La fragilidad fiscal (deuda y déficit) que se cierne no sólo sobre la moneda de reserva que emite EEUU sino sobre todo el bloque económico desarrollado.
4- El endurecimiento de la tensión entre Estados Unidos y China.
5- Las sanciones impuestas a Rusia tras la invasión de Ucrania en 2022 impulsan a varios países a diversificar sus reservas de divisas y reducir así su exposición al dólar estadounidense.
6- Expectativas de inflación y recesión (estanflación).
7- La tensión geopolítica sigue disparándose en Ucrania y Oriente Medio.
8- Los próximos recortes de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal de Estados. Si los atractivos rendimientos de la deuda pública se diluyen, muchos buscarán la alternativa del oro para refugiarse.
9- El debilitamiento del dólar debido tanto a los tipos de interés a la baja como a una economía debilitada y endeudada.
10- Vivimos la época de mayor incertidumbre desde la II Guerra Mundial.
En resumen, incluso con las subidas actuales, el mercado del oro no es lo bastante grande como para absorber un movimiento tan sostenido sin que suban mucho los precios.