El yen está siendo esta semana la moneda de mejor rendimiento en el mercado de divisas, con lo que recupera parte del terreno perdido en las semanas anteriores. La tendencia dominante sigue siendo bajista para el yen, sobre todo frente al dólar, apoyado no solamente en el aspecto técnico, sino también en el fundamental, teniendo en cuenta que la economía japonesa está en recesión y Estados Unidos crece; lo que lleva a grandes diferencias en las expectativas de política monetaria.
De todas formas, en el corto plazo el USD/JPY se mueve en un modo de corrección bajista. Una consolidación por encima de 120.00 pondría bajo peligro esta perspectiva bajista de corto plazo.
La cotización ha retrocedido hasta 117.90 (en el momento de mayor volatilidad del martes), aunque luego rebotó con fuerza. Aún no ha podido consolidarse por debajo de una línea de tendencia alcista de corto plazo, ni debajo de un retroceso de Fibonacci. La caída firma debajo de 118.80 confirmará el modo de operación actual, abriendo las puertas a un retroceso más significativo, posiblemente a probar otra línea alcista, que cruza actualmente por 117.80/90. Debajo el próximo soporte se ubica entre el retroceso de Fibonacci del 23.2% y 117.20.