Los principales índices bursátiles europeos volvieron a cerrar AYER en su mayoría con ligeros descensos, en una sesión en la que las noticias/rumores sobre el desenlace de la cumbre en Osaka (Japón) entre los presidentes de EE.UU. y China, Trump y Xi, “marcaron el paso” en todo momento a estos mercados. Así, y tras un positivo inicio de sesión, con los inversores animados por las noticias que había publicado la prensa china sobre una posible tregua en la guerra comercial entre ambos países, la filtración de las “duras” condiciones que el presidente chino, Xi, iba a exigir a EE.UU. para volver a reiniciar las negociaciones comerciales -ver detalle en sección de Economía y Mercados-, condiciones que creemos será muy complicado que el presidente de EE.UU., Trump, acepte, provocó que las bolsas europeas se giraran a la baja, manteniéndose desde entonces los principales índices en terreno negativo hasta el final de la jornada.
En el ámbito macroeconómico las noticias tampoco fueron positivas, ya que los índices de confianza empresarial y sectoriales, que elabora mensualmente la Comisión Europea (CE), volvieron a mostrar un deterioro importante de las expectativas que tienen los empresarios de la Zona Euro. Todo apunta que la ligera recuperación de estos indicadores adelantados de actividad en mayo fue un espejismo y que, por ahora, no se atisba mejora alguna en el escenario macro europeo, con el Brexit y el conflicto comercial entre EE.UU. y China como principales factores de incertidumbre que están afectando directamente a la inversión empresarial e, incluso, al consumo.
En Wall Street, y tras varios días de descensos, los inversores optaron AYER por ver el “vaso medio lleno”, pesando más en su comportamiento la posibilidad de que EE.UU. y China firmen una tregua comercial que impida la entrada en vigor de nuevas tarifas sobre las importaciones chinas que las condiciones que, aparentemente, va a poner China sobre la mesa para sentarse a negociar. En este mercado destacó el buen comportamiento del sector bancario, que descontaba de esta forma que la mayoría de las entidades superarían los test de estrés, los conocidos como Comprehensive Capital Analysis and Review (CCAR),que publicó la Reserva Federal (Fed) ya con el mercado cerrado -solo suspendió una entidad de dieciocho-. Ello permitirá a las grandes entidades de crédito estadounidense mejorar la remuneración de sus accionistas, tanto incrementando el dividendo como las compras de acciones, algo que varias de ellas, JPMorgan (NYSE:JPM), Morgan Stanley (NYSE:MS), Bank of America (NYSE:BAC), Wells Fargo (NYSE:WFC), y Goldman Sachs (NYSE:GS), no tardaron en anunciar que iban a hacer.
HOY, y al igual que sucedió AYER, la cumbre del G20, más concretamente las reuniones que al margen de la misma está teniendo el presidente de EE.UU., Trump, en las que está negociando posibles acuerdos comerciales con distintos países, seguirá condicionando el comportamiento de la renta variable. En este sentido, señalar que Trump se ha reunido ya con el primer ministro japonés, Abe, y con el recientemente reelegido primer ministro indio, Modi. Tras ambas reuniones Trump se ha mostrado optimista sobre la posibilidad de alcanzar importantes acuerdos comerciales con ambos países, países con los que recientemente había tenido algún que otro encontronazo en el ámbito comercial. No obstante, es la reunión que mantendrá MAÑANA con el presidente chino, Xi, la que verdaderamente interesa/preocupa a los inversores. Como ya dijimos AYER, nuestro escenario base es que ambos países acuerden sentarse nuevamente a negociar y que se establezca una tregua de unos meses en la que no se implementarán nuevas medidas de presión, es decir nuevas tarifas, por ninguna de las partes. Este desenlace sería bien acogido por los mercados. Cualquier otro en el que no logren llegar a un acuerdo para reconducir la actual situación de impasse por la que atraviesan las relaciones comerciales entre ambos países, provocaría recortes en las bolsas mundiales, tal y como ya ocurrió el pasado mayo cuando se rompieron las negociaciones.
Por lo demás, señalar que en la agenda macro del día destaca la publicación en la Zona Euro, Francia e Italia de las lecturas preliminares de la inflación de junio y en EE.UU. de los siempre relevantes ingresos y gastos personales, correspondientes al mes de mayo. Estas cifras van siempre acompañadas de la publicación del índice de precios de los consumidores (PCE), la variable de inflación que más tiene en cuenta la Fed, por lo que habrá que estar atentos a la misma para poder determinar el margen de maniobra con el que cuenta el banco central estadounidense si finalmente opta por bajar los tipos de interés oficiales.
Para empezar, esperamos una apertura plana en las bolsas europeas, con los inversores muy atentos a las noticias que lleguen desde Japón.