En la semana que HOY comienza la atención de los mercados financieros estará centrada en las cifras macroeconómicas que se vayan publicando, aunque el calendario no es muy intenso, ya que los inversores intentarán discernir la situación en que se encuentran las economías occidentales, y sobre todo, la británica y la estadounidense, ante las incertidumbres existentes.
Así, tras la publicación el pasado viernes del sorprendente, por elevado, número de puestos de trabajo creados en EEUU en julio, dato que vino a contrarrestar la preocupación generada por la publicación una semana antes de un débil crecimiento del PIB estadounidense en el segundo trimestre del año (2T2016), los inversores intentarán obtener nuevas pistas sobre la fortaleza económica y, en una segunda derivada, sobre sus consecuencias respecto a una posible subida de tipos por parte de la Fed –señalar que tras la publicación de las fuertes cifras de empleo, las probabilidades que los mercados dan a una subida de tipos en septiembre subieron sólo del 12% al 18% y las apuestas apuntan más al mes de diciembre ante un panorama macroeconómico que todavía no está claro y con las elecciones presidenciales de EEUU que se celebrarán en noviembre.
En este sentido, las fuertes cifras del mercado laboral concuerdan con la fortaleza que ha venido mostrando el consumo privado, mientras que, por el contrario, el descenso de la inversión empresarial y el desestocaje de las empresas han sido lo que ha lastrado el crecimiento económico en el 2T2016. Así, el difícil panorama internacional y la proximidad de las elecciones presidenciales en EEUU parece que están provocando un tono de cautela en las empresas, y no es descartable que éstas estén supliendo inversión por incremento de mano de obra para atender el crecimiento de la demanda, lo que podría acabar suponiendo una pérdida de productividad a medio plazo. Por ello, la primera gran cita de la semana serán las cifras de productividad en el 2T2016 en EEUU, que se publican el martes. Posteriormente, los inversores ya tendrán que esperar al viernes para tener toda una batería de cifras sobre la economía estadounidense: el índice de precios de producción (IPP) de julio, las ventas al por menor de julio, los inventarios de negocio de junio y el índice de sentimiento de la Universidad de Michigan de agosto.
También estarán en el foco de atención las cifras macroeconómicas que se publiquen en Reino Unido, economía para la que actualmente la visibilidad es ciertamente muy reducida, destacando las correspondientes a las ventas al por menor de julio y la producción industrial y la balanza comercial del mes de junio que se conocerán MAÑANA (T:9202). Igualmente, debemos destacar las declaraciones realizadas el pasado viernes por uno de los miembros del comité de política monetaria del Banco de Inglaterra (BoE), Ben Broadbent, advirtiendo del fuerte impacto al que se enfrenta la economía británica en los próximos años por el Brexit y para el que la política monetaria y la política fiscal ofrecen soluciones limitadas. Por tanto, y tal y como señalábamos la pasada semana, la incertidumbre que acecha a la economía británica y su posible contagio a la Unión Europea (UE), su principal socio comercial, y al resto del mundo, son un lastre que se va a quedar para largo en los mercados financieros.
Finalmente, señalar que en el resto de Europa destaca esta semana la publicación de la producción industrial de Alemania de junio HOY; el martes la balanza comercial también de Alemania (junio); el miércoles la producción industrial de Francia (junio); el jueves el IPC de Francia (julio); y finalmente el viernes el IPC (julio) y el PIB (2T2016) de Alemania, el IPC (julio) y los pedidos industriales (junio) de España, y el PIB (2T2016) y la producción industrial (junio) de la Eurozona.
Con todo esto, esperamos que HOY las Bolsas europeas mantengan el buen tono de cierre del viernes. No obstante, creemos que las incertidumbres que acechan a los mercados -no sólo en la forma del Brexit, sino en cuanto a la situación política, con elecciones en noviembre en EEUU, el referéndum en Italia sobre la reforma constitucional que se celebrará en otoño, la situación de desacuerdo entre los partidos políticos españoles para formar gobierno-, en un escenario en el que, además, el papel y la capacidad de los bancos centrales para impulsar las economías desarrolladas está siendo cuestionados, pesarán sobre los mercados financieros en las próximas semanas, por lo que vemos difícil que las Bolsas puedan consolidar una tendencia alcista. Además, esperamos que el volumen de contratación se vaya reduciendo a medida que avanza el mes de agosto, lo que puede provocar fuertes movimientos puntuales en los índices.