El oro quebró una línea de tendencia bajista importante durante enero, que impulsó a la cotización a llegar por encima de $1.300 la onza.
El precio no logró sostenerse por encima de la misma, y comenzó a retroceder, llegaron a operar momentáneamente por debajo de la línea de tendencia que había quebrado.
La zona que finalmente le dio soporte al precio fue la media móvil de 20 días, que cruza actualmente por $1.250/60. En caso de cerrar por debajo, es de esperar un retroceso mayor.
En el corto plazo se nota un sesgo bajista, con el precio aproximándose a soporte importante. Un regreso por encima de $1.290 daría momento alcista al precio, abriendo las puertas para un regreso por encima de $1.300.