Empezamos el mes de octubre, un mes con el que poco a poco nos aproximaremos a una de los periodos más importantes para las bolsas y, por lo tanto, para nuestras carteras. Si bien, estamos en una situación en la que seguimos a la espera de que camino finalmente deciden tomar las bolsas. La jornada de hoy ha permitido a las bolsas europeas alejarse del susto que recibieron con el cierre de la semana pasada. En unos casos mejor que otros, porque en el nuestro particular, la indecisión ha caracterizado el comienzo de la semana, como podemos ver con los dos dojis que se han formado. Podríamos haber recibido algo de influencia por parte del resto de mercados, que parecen haber cogido la directa con más fuerza para volver a enfrentarse a sus respectivas resistencias: DAX 10.800/10.850, CAC 4.550/4.600, EUROSTOXX 3.100/3.150... En este caso, más que un precio, prefiero dar una zona, ya que a veces, la base de una buena ruptura es la fuerza con la que se hace. No obstante, en todos los casos, se encuentran aún por debajo de los máximos de la semana pasada, un pequeño imprevisto que habrá que superar si queremos alcanzar nuestro principal objetivo.
Al IBEX le pasa lo mismo, lo que pasa que su comportamiento de hoy ha sido más ridículo e indeciso y eso, para atisbar un siguiente paso, se hace más complicado. Esta justo en la pelea con su directriz bajista de septiembre y con sus medias móviles. Me gustaría verlo por encima de los 8.865 y, es más, superar Fibo, irse a por los 9.000 y cerrar el gap bajista de hace unas semanas (no pido mucho, ¿no?). En definitiva, unir diferentes señales positivas, para que la probabilidad de ir a por los 9.360 sea cada vez mayor. El punto culminante pasaría por superar la zona de 9.135/50, un duro rival que ya intentamos superar sin éxito a finales de mayo y el pasado mes de septiembre. Por lo tanto, serán importantes la próximas sesiones para arrojar un poco más de claridad al asunto, no sólo aquí, si no también en las principales bolsas de referencia. Prohibido flaquear ahora.