Washington, 15 jun (EFE).- Google lanzó hoy un ambicioso programa con el que pretende conectar a Internet a miles de millones de personas que viven en áreas remotas, pobres o afectadas por desastres naturales, a través de gigantes globales de helio equipados para emitir señales de wifi.
El gigante de Internet anunció en su blog oficial y en un vídeo en su cuenta de YouTube el nuevo programa, llamado Project Loon, y que pretende crear "una red de Internet en el cielo".
Para ello, Google usará globos de unos 15 metros en diámetro que, gracias a la energía solar, ascenderán a la estratosfera y se mantendrán unidos sobre una zona específica gracias a "complejos algoritmos y mucho poder informático", según explicó Mike Cassidy, el director del proyecto.
"Aún estamos en la primera etapa, pero hemos construido un sistema que usa globos, trasladados por el viento al doble de altitud de la que vuelan los aviones comerciales, para proporcionar acceso a Internet a la tierra a velocidades similares o más rápidas que las de las redes de 3G de hoy", señaló Cassidy.
El equipo inició hoy un programa piloto en Nueva Zelanda, dotado de 30 globos que tratarán de conectar a 50 personas en una primera prueba destinada a "aprender sobre cómo mejorar nuestra tecnología y el diseño de los globos".
"En el futuro, nos gustaría iniciar programas pilotos en países que compartan latitud con Nueva Zelanda", señaló Cassidy.
Esa franja incluye países como Argentina, Chile, Sudáfrica o Australia, situados en el paralelo 40, que presenta unas condiciones estratosféricas ideales para el proyecto de Google.
"Imaginamos que, algún día, ustedes serán capaces de usar su teléfono móvil con su proveedor de servicio actual para conectarse a los globos y conseguir una conexión donde hoy no la hay", apuntó.
Cassidy reconoció que la idea "puede sonar un poco loca", pero "tiene un respaldo científico sólido".
El proyecto ha sido desarrollado por ingenieros del laboratorio secreto Google X, situado en Silicon Valley (California) y que trabaja en tecnologías revolucionarias, como las gafas Google Glass o los autos sin piloto.
Según el "capitán" de esos proyectos en Google X, apodado Astro Teller, el gran reto de Project Loon ha sido "navegar los globos" a través de las corrientes de aire de la estratosfera para que se mantengan juntos, y garantizar que "cuando un globo abandone el grupo, otro llegue para tomar su lugar".
El sistema consiste en que una serie de "antenas de Internet en el terreno" se conectan con uno de los globos, que a su vez contactan al resto de los globos y después a una estación terrestre que está ligada a un proveedor de Internet.
Los globos filtran todas las señales de Internet para procesar sólo las que procedan del proyecto de Google, que puede además dirigirlos para que aterricen en varios puntos designados y puedan ser reciclados.
El hecho de que, en la mayor parte de la estratosfera, los vientos circulen "de oeste a este" permitirá que "eventualmente, el globo que está por encima de Sudáfrica pueda pasar por encima de Sudamérica", explicó Astro Teller en el vídeo de presentación.
El objetivo de Google es "empezar un debate sobre cómo conseguir que 5.000 millones de personas que viven en áreas remotas" se conecten a Internet, según explicó Cassidy en una entrevista con el diario Washington Post.
Google necesitará el permiso de los Gobiernos de los países en los que quiera hacer circular sus globos, que duran unos 100 días en el aire y cuya señal puede captarse siempre que el receptor esté en un radio de unos 38 kilómetros.
Cassidy consideró que el programa puede marcar una gran diferencia en la mayoría de los países del hemisferio sur, donde "el coste de una conexión a Internet es superior al del ingreso de un mes". EFE
llb/dmt
El gigante de Internet anunció en su blog oficial y en un vídeo en su cuenta de YouTube el nuevo programa, llamado Project Loon, y que pretende crear "una red de Internet en el cielo".
Para ello, Google usará globos de unos 15 metros en diámetro que, gracias a la energía solar, ascenderán a la estratosfera y se mantendrán unidos sobre una zona específica gracias a "complejos algoritmos y mucho poder informático", según explicó Mike Cassidy, el director del proyecto.
"Aún estamos en la primera etapa, pero hemos construido un sistema que usa globos, trasladados por el viento al doble de altitud de la que vuelan los aviones comerciales, para proporcionar acceso a Internet a la tierra a velocidades similares o más rápidas que las de las redes de 3G de hoy", señaló Cassidy.
El equipo inició hoy un programa piloto en Nueva Zelanda, dotado de 30 globos que tratarán de conectar a 50 personas en una primera prueba destinada a "aprender sobre cómo mejorar nuestra tecnología y el diseño de los globos".
"En el futuro, nos gustaría iniciar programas pilotos en países que compartan latitud con Nueva Zelanda", señaló Cassidy.
Esa franja incluye países como Argentina, Chile, Sudáfrica o Australia, situados en el paralelo 40, que presenta unas condiciones estratosféricas ideales para el proyecto de Google.
"Imaginamos que, algún día, ustedes serán capaces de usar su teléfono móvil con su proveedor de servicio actual para conectarse a los globos y conseguir una conexión donde hoy no la hay", apuntó.
Cassidy reconoció que la idea "puede sonar un poco loca", pero "tiene un respaldo científico sólido".
El proyecto ha sido desarrollado por ingenieros del laboratorio secreto Google X, situado en Silicon Valley (California) y que trabaja en tecnologías revolucionarias, como las gafas Google Glass o los autos sin piloto.
Según el "capitán" de esos proyectos en Google X, apodado Astro Teller, el gran reto de Project Loon ha sido "navegar los globos" a través de las corrientes de aire de la estratosfera para que se mantengan juntos, y garantizar que "cuando un globo abandone el grupo, otro llegue para tomar su lugar".
El sistema consiste en que una serie de "antenas de Internet en el terreno" se conectan con uno de los globos, que a su vez contactan al resto de los globos y después a una estación terrestre que está ligada a un proveedor de Internet.
Los globos filtran todas las señales de Internet para procesar sólo las que procedan del proyecto de Google, que puede además dirigirlos para que aterricen en varios puntos designados y puedan ser reciclados.
El hecho de que, en la mayor parte de la estratosfera, los vientos circulen "de oeste a este" permitirá que "eventualmente, el globo que está por encima de Sudáfrica pueda pasar por encima de Sudamérica", explicó Astro Teller en el vídeo de presentación.
El objetivo de Google es "empezar un debate sobre cómo conseguir que 5.000 millones de personas que viven en áreas remotas" se conecten a Internet, según explicó Cassidy en una entrevista con el diario Washington Post.
Google necesitará el permiso de los Gobiernos de los países en los que quiera hacer circular sus globos, que duran unos 100 días en el aire y cuya señal puede captarse siempre que el receptor esté en un radio de unos 38 kilómetros.
Cassidy consideró que el programa puede marcar una gran diferencia en la mayoría de los países del hemisferio sur, donde "el coste de una conexión a Internet es superior al del ingreso de un mes". EFE
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