Washington, 15 sep (EFE).- La Casa Blanca emitió hoy un informe sobre los avances económicos realizados en los últimos cinco años, coincidiendo con el 5º aniversario de la caída del gigante de inversión Lehman Brothers, en el que destaca el crecimiento sostenido y los buenos resultados de los test de estrés a la banca.
Este informe describe los elementos clave de la respuesta de la Administración Obama a la crisis financiera y proporciona una visión global de la economía estadounidense, así como de las acciones que el Gobierno tomó al respecto.
Entre las medidas que destaca, el documento subraya la rápida respuesta para rescatar a la industria automotriz, así como la puesta en práctica de los test de estrés a la banca y el apoyo gubernamental para la continuidad de los préstamos crediticios.
"En febrero de 2009, la Administración y los reguladores bancarios federales anunciaron pruebas integrales de estrés de los bancos más grandes del país para reducir la incertidumbre en cuanto a su solvencia, ayudar a estabilizar el sistema financiero y asegurar que fueran capaces de seguir prestando", apunta.
"Las pruebas de estrés a los bancos permitieron recaudar más de 80.000 millones de dólares en nuevos capitales privados", lo que facilitó que la banca no tuviera que recurrir a la ayuda federal a diferencia de empresas como General Motors, añade el informe.
La Casa Blanca también enfatiza el resultado del Programa de Modificación para el Acceso a la Vivienda (HAMP), gracias al cual, según sus datos, 7 millones de hogares recibieron refinanciación.
"Aunque aún queda mucho camino por recorrer para recuperarse del impacto de la crisis financiera y el progreso ha sido desigual hasta ahora, a finales de 2012 los estadounidenses habían recuperado 14.700 millones del valor agregado neto doméstico, recuperando el 91% de las pérdidas de la recesión", asegura la Casa Blanca.
En el período previo a la crisis financiera, muchos de los bancos más grandes asumieron riesgos excesivos sin las salvaguardas adecuadas.
El Gobierno Obama ejecutó la conocida como reforma de Wall Street, que estableció estándares más exigentes a las empresas más grandes, limitando directamente su interconexión y permitiendo que los reguladores identificaran los riesgos fuera del sistema bancario.
"Nuestras empresas han creado siete millones y medio de nuevos puestos de trabajo. Los fabricantes han creado empleos por primera vez desde mediados de los 90 y generamos más energía renovable que nunca", dice el informe.
El texto también destaca la reducción del déficit, que según apunta ha disminuido en un 50% desde que Obama asumió el cargo.
A falta de apenas dos semanas para que se aprueben los presupuestos para el año fiscal 2014, que empieza el 1 de octubre, el texto también llama al Congreso para advertir que la economía estadounidense no puede permitirse el lujo de no pagar sus deudas y caer en un cierre parcial del Gobierno Federal.
Aún así, la Casa Blanca asume que "queda un largo camino por recorrer" y que la estabilización robusta de la economía pasa por continuar fortaleciendo a la clase media.
Obama pronunciará un discurso el próximo lunes en la Casa Blanca en conmemoración del 5º aniversario del inicio de la crisis financiera y discutirá los avances económicos llevados a cabo desde entonces, en un intento de devolver a la agenda pública los asuntos domésticos tras semanas centrada en la crisis siria.
El 15 de septiembre de 2008, el que fuera uno de los principales bancos de inversión de EEUU se veía forzado a declararse en bancarrota después de que la Casa Blanca y la Reserva Federal decidieran no acudir a su rescate y que las mayores entidades del país rechazaran hacerse con él, lo que marcó el inicio de la mayor crisis financiera desde la Gran Depresión. EFE
Este informe describe los elementos clave de la respuesta de la Administración Obama a la crisis financiera y proporciona una visión global de la economía estadounidense, así como de las acciones que el Gobierno tomó al respecto.
Entre las medidas que destaca, el documento subraya la rápida respuesta para rescatar a la industria automotriz, así como la puesta en práctica de los test de estrés a la banca y el apoyo gubernamental para la continuidad de los préstamos crediticios.
"En febrero de 2009, la Administración y los reguladores bancarios federales anunciaron pruebas integrales de estrés de los bancos más grandes del país para reducir la incertidumbre en cuanto a su solvencia, ayudar a estabilizar el sistema financiero y asegurar que fueran capaces de seguir prestando", apunta.
"Las pruebas de estrés a los bancos permitieron recaudar más de 80.000 millones de dólares en nuevos capitales privados", lo que facilitó que la banca no tuviera que recurrir a la ayuda federal a diferencia de empresas como General Motors, añade el informe.
La Casa Blanca también enfatiza el resultado del Programa de Modificación para el Acceso a la Vivienda (HAMP), gracias al cual, según sus datos, 7 millones de hogares recibieron refinanciación.
"Aunque aún queda mucho camino por recorrer para recuperarse del impacto de la crisis financiera y el progreso ha sido desigual hasta ahora, a finales de 2012 los estadounidenses habían recuperado 14.700 millones del valor agregado neto doméstico, recuperando el 91% de las pérdidas de la recesión", asegura la Casa Blanca.
En el período previo a la crisis financiera, muchos de los bancos más grandes asumieron riesgos excesivos sin las salvaguardas adecuadas.
El Gobierno Obama ejecutó la conocida como reforma de Wall Street, que estableció estándares más exigentes a las empresas más grandes, limitando directamente su interconexión y permitiendo que los reguladores identificaran los riesgos fuera del sistema bancario.
"Nuestras empresas han creado siete millones y medio de nuevos puestos de trabajo. Los fabricantes han creado empleos por primera vez desde mediados de los 90 y generamos más energía renovable que nunca", dice el informe.
El texto también destaca la reducción del déficit, que según apunta ha disminuido en un 50% desde que Obama asumió el cargo.
A falta de apenas dos semanas para que se aprueben los presupuestos para el año fiscal 2014, que empieza el 1 de octubre, el texto también llama al Congreso para advertir que la economía estadounidense no puede permitirse el lujo de no pagar sus deudas y caer en un cierre parcial del Gobierno Federal.
Aún así, la Casa Blanca asume que "queda un largo camino por recorrer" y que la estabilización robusta de la economía pasa por continuar fortaleciendo a la clase media.
Obama pronunciará un discurso el próximo lunes en la Casa Blanca en conmemoración del 5º aniversario del inicio de la crisis financiera y discutirá los avances económicos llevados a cabo desde entonces, en un intento de devolver a la agenda pública los asuntos domésticos tras semanas centrada en la crisis siria.
El 15 de septiembre de 2008, el que fuera uno de los principales bancos de inversión de EEUU se veía forzado a declararse en bancarrota después de que la Casa Blanca y la Reserva Federal decidieran no acudir a su rescate y que las mayores entidades del país rechazaran hacerse con él, lo que marcó el inicio de la mayor crisis financiera desde la Gran Depresión. EFE