Por Iain Rogers
MADRID (Reuters) - El Barcelona está exactamente donde quiere estar para preparar dos partidos esta semana que podrían suponer un punto de inflexión en la primera temporada de Luis Enrique al mando.
El Barça ha ganado 16 de los 18 partidos que ha disputado en 2015, con sólo dos derrotas ante Real Sociedad y Málaga en liga, y tiene la posibilidad de repetir el histórico triplete de 2009, cuando ganó Liga, Liga de Campeones y Copa del Rey.
El equipo catalán se impuso por 2-1 al Manchester City en la ida de los octavos de final de la máxima competición europea de clubes y recibirá el miércoles al Manchester City para la vuelta. Mientras, se mantendrán al menos a un punto del Real Madrid como líderes de la tabla tras la jornada del domingo y se enfrentarán al Athletic Bilbao en mayo en la final de la Copa del Rey.
Una de los motivos del éxito de los azulgrana es la gran forma de su estrella, Lionel Messi, que ha marcado goles a placer desde que empezó el año.
El delantero argentino añadió otros dos tantos a su cuenta en la victoria liguera del sábado ante el Éibar, un partido que dejó al Barcelona como líder y con una ventaja de cuatro puntos, a la espera de lo que haga el Real Madrid, en segunda posición, cuando reciba al Levante a última hora del domingo.
Con Xavi y Andrés Iniesta en el banquillo, Messi capitaneó al equipo y puso por delante a los suyos convirtiendo un penalti por mano en el minuto 31.
El jugador de 27 años volvió a marcar en el minuto 10 de la segunda mitad, rematando de cabeza un saque de córner y sumando ya 32 goles en liga y 43 entre todas las competiciones - dos más de los que logró en la campaña 2013-2014.
Messi, que aventaja en dos tantos a Cristiano Ronaldo en la carrera por el pichichi, ha marcado al menos dos veces en 120 partidos para el club o la selección, 112 con el Barça y 8 con Argentina.
Le quedan 11 partidos de liga para intentar superar su propio récord goleador de 50 dianas firmado en la temporada 2011-12.
Las especulaciones después de la derrota en Anoeta de que la relación entre Messi y Luis Enrique podría haberse deteriorado hasta el punto de que el argentino podría incluso dejar el club al que llegó con trece años cayeron hace tiempo en el olvido.
"Llegaremos al Clásico como líderes y en perfecto estado", dijo Luis Enrique en la rueda de prensa que siguió a la victoria de su equipo en el estadio de Ipurúa el sábado.
"Pero hay que centrarse en el City porque nos jugamos la clasificación", dijo el exfutbolista. "Luego ya veremos qué pasa el fin de semana", añadió. 2015-03-15T141530Z_1007100001_LYNXMPEB2E0BJ_RTROPTP_1_OESSP-BARCELONA-FUTBOL.JPG