Río de Janeiro, 15 dic (EFE).- La economía brasileña, impulsada
por una fuerte recuperación de la industria y por el aumento del
consumo y de la inversión, crecerá un 5,5% en 2010, según la
previsión divulgada hoy por la Confederación Nacional de la
Industria (CNI).
"Tras un año de estancamiento causado por la crisis económica que
afectó al mundo, Brasil comenzará 2010 en ritmo acelerado de
crecimiento", de acuerdo con el Informe Coyuntural de la patronal de
los industriales.
La previsión del sector industrial para el crecimiento del
Producto Interior Bruto (PIB) el próximo año se ubica por encima de
la del propio Gobierno (5,0%) y de la calculada por los economistas
de los bancos (5,03%).
La industria, el sector más afectado por la crisis en Brasil y
cuya producción sufrirá una caída del 4,5% este año, se recuperará
en 2010 con una expansión del 7,0%, según prevé el propio sector.
"El crecimiento de la economía esperado para 2010 hará que la
producción industrial supere ya en el primer semestre del año el
nivel en que se encontraba antes de la crisis", asegura el
documento.
Para los economistas de la Confederación, la recuperación de la
producción favorecerá la generación de empleos y el aumento de la
renta de los trabajadores, lo que permitirá que el consumo interno
siga siendo el principal impulsor del crecimiento económico.
Según la CNI, el consumo interno registrará en 2010 un salto del
5,6%, muy por encima del 3,7% que se espera para este año.
De la misma forma, tras una contracción del 10,8% este año, las
inversiones aumentarán un 14% en 2010, más del doble del ritmo de
expansión de la propia economía.
Ese aumento permitirá que la relación de la inversión con
respecto al PIB suba desde 16,9% este año hasta 18,3% el próximo.
"Los factores que permiten proyectar esa tendencia son la
elevación del nivel de capacidad instalada de la industria, el
aumento de la confianza de los industriales, la reducción de los
costos y el aumento de la disponibilidad de crédito a largo plazo",
según el Informe Coyuntural de la patronal.
Los industriales también prevén que el índice promedio de
desempleo del país bajará desde el 8,1% este año al 7,6% en 2010.
La única preocupación manifestada por la CNI es con la tasa de
cambio, que terminará en 2010 en 1,70 reales por dólar, casi igual
que este año (1,72 reales por dólar).
La entidad atribuye la actual fuerte apreciación del real al
aumento de las inversiones extranjeras en Brasil y a las bajas tasas
de intereses en Estados Unidos, que proseguirán en ese nivel y
estimulan la captación de préstamos en dólares para su inversión en
países emergentes como Brasil.
De acuerdo con el gremio, con el cambio favorable, las
importaciones aumentarán un 38% en 2010 en comparación con este año
y se ubicarán en 175.000 millones de dólares, en tanto que las
exportaciones apenas subirán 24% hasta 188.000 millones de dólares.
"El superávit comercial del país retrocederá desde los 25.200
millones de dólares proyectados para 2009 hasta 13.000 millones de
dólares el próximo año", alertan los industriales.
El crecimiento económico proyectado para el próximo año permitirá
que Brasil supere el mal desempeño de 2009, cuando el PIB puede
registrar una contracción.
Los economistas de los bancos brasileños, que hasta hace una
semana preveían que Brasil cerraría 2009 con un crecimiento
económico del 0,21%, ahora esperan un retroceso del 0,26%, según una
encuesta divulgada ayer por el Banco Central.
La revisión de la previsión se produjo después de que el Gobierno
divulgara que el PIB apenas creció un 1,3% en el tercer trimestre de
este año frente al segundo, un porcentaje muy inferior al esperado
por el Ministerio de Hacienda, que confiaba en una expansión del 2%.
EFE