Bruselas, 5 jul (EFE).- El Parlamento Europeo (PE) ha aprobado hoy tres medidas que endurecerán la regulación de los mercados de productos financieros como derivados o seguros de impago.
El pleno de la Eurocámara, que se celebra esta semana en Estrasburgo (Francia), ha aprobado una nueva legislación sobre indemnizaciones a inversores privados víctimas de empresas de inversión fraudulentas o de "mal asesoramiento", según indicó un comunicado del PE.
La nueva normativa reducirá de diez a cinco años el tiempo de compensación, incrementará la armonización europea en el diseño de los esquemas de compensación, aumentará las contribuciones de las compañías financieras que arriesguen más y permitirá a empresas y organizaciones sin ánimo de lucro presentar peticiones de indemnización por 50.000 euros, un derecho hasta ahora reservado a particulares.
El Parlamento también ha dado luz verde a un informe sobre las ventas de activos en corto, y que obligará a los inversores a cubrir sus posiciones en corto al final de cada jornada bajo multas "disuasivas", aunque también han aprobado que reducir la frecuencia con la que deben comunicarse este tipo de transacciones.
La venta en corto o al descubierto ('short selling', en inglés) es una práctica financiera especulativa que se aplica a aquellos activos cuyo precio se prevé que va a caer.
De este modo, un inversor toma prestado un activo con la promesa de devolverlo al cabo de un tiempo junto a una pequeña suma de dinero adicional como interés.
En el momento en el que el inversor toma prestado este activo, lo vende para recomprarlo justo antes de devolverlo a su propietario original.
De este modo, el inversor gana dinero si el precio del activo cae desde el momento en el que lo toma prestado hasta que lo devuelve a su primer dueño, ya que, durante este tiempo, primero lo vende y, después lo recupera a un precio menor.
Asimismo, la Eurocámara ha restringido la compra de seguros contra el impago de deuda (CDS, 'Credit Default Swaps', en inglés) a inversores o entidades que posean bonos públicos relacionados con estos CDS o acciones de empresas cuyos resultados dependan de la evolución de los títulos públicos.
En tercer lugar, el pleno ha dado su visto bueno a regular las operaciones de derivados 'over-the-counter' (OTC), es decir, aquellas compraventas de derivados entre dos partes sin intermediación.
Este tipo de operaciones, que en 2009 sumaron un volumen de 425 billones de euros, deberán ser comunicadas y aprobadas por las autoridades, en este caso la Autoridad Europea de Mercados Financieros (ESMA), lo que reducirá el riesgo de quiebra de alguna de las partes.
Todas las medidas deberán ser aprobadas también por el Consejo de la UE, en el que están representados los gobiernos de los Veintisiete estados miembros.
La Comisión Europea ya presentó el año pasado medidas para regular estos tres mercados, tras el pacto entre la Eurocámara y los estados miembros para aumentar la supervisión financiera. EFE