Por Barani Krishnan
Investing.com -- El crudo estadounidense tocó el extremo inferior de los 80 dólares por barril el martes, en medio de informes de que el gobierno de Biden planeaba vender más de las reservas de petróleo de emergencia del país para contrarrestar los recortes de producción anunciados por la alianza de productores OPEP+, que podrían perjudicar al presidente y a su partido en las elecciones del próximo mes.
El West Texas Intermediate crude, la referencia del crudo estadounidense, había subido hasta casi 94 dólares el 10 de octubre, tras el recorte de producción de 2 millones de barriles diarios a partir de noviembre que la OPEP había anunciado el 5 de octubre. Antes de eso, el WTI había tocado un mínimo de 8 meses por debajo de los 75 dólares por barril.
A las 11:15 ET del martes, el WTI se situaba en 81.70 dólares por barril, tras un mínimo de sesión de 81.33 dólares. Alcanzó un máximo de 93.48 dólares el 10 de octubre tras los recortes de producción previstos por la OPEP+.
El petróleo Brent, que cotiza en Londres, se situó el martes por debajo de los 90 dólares, tras un mínimo intradía de 88.81 dólares. Alcanzó los 98.75 dólares el 10 de octubre.
La subida impulsada por la OPEP+ en las dos últimas semanas había empezado a hacer subir también los precios del combustible en Estados Unidos, lo que era una mala noticia para el presidente Joe Biden y los demócratas de cara a las elecciones de mitad de mandato del 8 de noviembre. La alianza de productores de petróleo está liderada por Arabia Saudita, con Rusia como su mayor aliado -ninguno de los cuales es gran fan de Biden.
Tanto Bloomberg como Reuters informaron el martes, citando fuentes, que la administración Biden planea vender 26 millones de barriles adicionales de la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR, por sus siglas en inglés) para el año fiscal 2023. Antes de eso, la administración tiene otros 14 millones de barriles que retirar de la SPR en el marco de una campaña para vender 180 millones de barriles en seis meses.
Los inventarios de la SPR han caído a su nivel más bajo desde 1984 debido a las agresivas medidas de la administración para bajar los precios de la gasolina en los surtidores antes de las elecciones.
El martes, el precio medio en los surtidores era de 3.87 dólares por galón, frente a los 3.92 de hace una semana. A mediados de junio, el precio alcanzó la cifra récord de 5 dólares.
Los críticos de Biden del partido republicano le han acusado de poner en riesgo la reserva de petróleo de emergencia del país con tal de intentar mantener el control demócrata del Congreso y el Senado de Estados Unidos.
La SPR se utiliza normalmente para mitigar la escasez de petróleo en el mercado nacional y no para reducir los precios de la energía.
Sin embargo, Biden ha argumentado que el bienestar de los estadounidenses, que luchan contra la peor inflación en cuatro décadas debido a los altos precios de la energía, es una prioridad mayor ahora.
El presidente y sus asesores también se han enfadado por la supuesta coacción ejercida por los saudíes para conseguir que algunos de los 23 países de la OPEP+ hagan un recorte mayor del necesario. Biden ha dicho que habrá "consecuencias" para Riad por su actuación, sobre todo en apoyo de Rusia, a la que Estados Unidos y sus aliados han tratado de castigar con menores ingresos del petróleo en medio de la guerra de Moscú con Ucrania. Los saudíes y el resto de la OPEP+ han hecho todo lo posible durante los últimos quince días para negar las afirmaciones de Biden de que el recorte de la producción tenía una motivación política.
La incertidumbre sobre la demanda de combustible en China, el mayor importador de petróleo del mundo, también pesó en los precios del crudo el martes. Las perspectivas de la demanda de combustible en China influyeron en el sentimiento después de que el gigante asiático retrasara la publicación de los indicadores económicos previstos inicialmente para el martes. No se dio ninguna fecha para la reprogramación de la publicación.
Los participantes del mercado también estuvieron atentos a los datos de los inventarios semanales de petróleo de Estados Unidos, que se publicarán después de la liquidación del mercado por parte del API, o Instituto Americano del Petróleo.
El API publicará aproximadamente a las 16:30 ET (20:30 GMT) una instantánea de los saldos de cierre del crudo, la gasolina y los destilados de Estados Unidos para la semana terminada el 14 de octubre. Las cifras sirven como precursoras de los datos oficiales de inventarios sobre los mismos que publicará la Administración de Información Energética de EE.UU. el miércoles.
Para la semana pasada, los analistas consultados por Investing.com esperan que la EIA informe de una acumulación de reservas de crudo de 1.55 millones de barriles, que se suman al aumento de 9.88 millones de barriles registrado durante la semana del 7 de octubre.
En cuanto a las existencias de gasolina, el consenso es que se reduzcan en 2 millones de barriles, por encima de los 2.02 millones de barriles de la semana anterior.
En cuanto a las existencias de destilados, se espera un nuevo descenso de 2.18 millones de barriles tras la caída de 4.85 millones de la semana anterior.