PARÍS, 26 ene (Reuters) - La producción ucraniana de maíz y trigo caerá por segundo año consecutivo en 2023, con una cosecha de maíz que no superará los 18 millones de toneladas y una de trigo de 16 millones de toneladas, ya que los agricultores reducirán la siembra debido a la guerra, dijo el jueves un grupo del sector de los cereales.
Las proyecciones mostraban el mejor de los panoramas, ya que la producción podría caer de forma más brusca dependiendo del clima y las dificultades financieras de las granjas, dijo a Reuters el jefe de la Asociación de Granos de Ucrania (UGA), Nikolay Gorbachov, al margen de la Conferencia de Granos de París de Argus Media.
La disrupción del comercio de exportación tras la invasión rusa del año pasado ha dejado a muchos agricultores produciendo con pérdidas, destacó.
"Para los agricultores ha dejado de ser rentable producir grano y por eso han reducido la superficie sembrada", explicó.
En conjunto, la producción ucraniana de cereales y oleaginosas podría descender a unos 50 millones de toneladas, frente a los 67 millones de 2022 y los 106 millones de 2021, según las estimaciones de la UGA.
Ucrania ha logrado exportar unos 30 millones de toneladas de cereales y oleaginosas hasta ahora en la temporada 2022/23 utilizando un corredor de cereales del Mar Negro negociado con Rusia, así como rutas alternativas a través de países de la Unión Europea, comentó.
No obstante, los retrasos en el corredor del Mar Negro y una logística menos eficiente en las rutas alternativas están generando altos costos que golpean los precios a pie de granja, señaló, al tiempo que culpó a Rusia de ralentizar las inspecciones de buques en el corredor.
El maíz se ha visto especialmente afectado por las restricciones financieras, ya que es relativamente caro de cultivar, secar y transportar, dijo, añadiendo que alrededor del 10% de la cosecha de 2022 seguía sin cosecharse mientras los agricultores esperaban a que se secaran algunos campos.
(Reporte de Gus Trompiz; editado en español por Carlos Serrano)