Roma, 11 may (.).- El primer ministro italiano, Mario Draghi, afirmó hoy que "la mayoría de los importadores" europeos de gas ruso "han abierto sus cuentas en rublos" para pagar a Moscú y que la Unión Europea (UE) no se ha pronunciado oficialmente sobre si el pago en divisa local infringe las sanciones impuestas al Kremlin por su invasión a Ucrania.
El gigante de hidrocarburos ENI (BIT:ENI), controlado al 30 % por el Tesoro italiano, debe saldar un primer pago de sus compras de gas ruso a mediados de mayo y en abril pidió a las autoridades italianas y europeas que se expresaran de forma clara sobre si el pago en rublos, como exige el presidente ruso, Vladímir Putin, a algunos compradores, no está permitido.
Draghi, de viaje en Estados Unidos, fue preguntado este miércoles por si Italia asumirá sus compromisos con Rusia sin infringir las sanciones y el mandatario italiano argumentó que sí: "No hay un pronunciamiento oficial de lo que significa incumplir las sanciones. Nadie ha dicho nunca nada sobre si el pago en rublos infringe las sanciones o no", justificó, sin precisar si el pago de ENI se hará en rublos o en euros.
Draghi opinó que "hay una gran zona gris" respecto al desembolso en rublos y sostuvo que numerosas empresas en Alemania "ya han pagado" en esta divisa.
"De hecho, la mayoría de los importadores de gas ya han abierto su cuenta en rublos con Gazprom (MCX:GAZP)", agregó.
El primer ministro italiano urgió el 3 de mayo a la Comisión Europea (CE) a que se pronunciara de forma clara y cuanto antes sobre esta cuestión.
"Es muy importante que la Comisión exprese una opinión jurídica clara sobre si el pago en rublos incumple las sanciones o no, es la única manera de mantenernos todos unidos. Si no hay una línea, cada empresa o país hará lo que crea conveniente", sostuvo entonces el expresidente del Banco Central Europeo (BCE).
Putin trata de presionar a algunos compradores extranjeros a pagar el gas en rublos como medida para reforzar la divisa, tras el duro golpe sufrido por las sanciones de los países occidentales contra Moscú, y la gasística rusa Gazprom ya decidió cortar el suministro a Polonia y Bulgaria por negarse a pagar en moneda local.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha señalado que las empresas energéticas europeas que tengan contratos en euros o dólares "no deben acceder a las demandas rusas" porque estarían violando las sanciones europeas contra Moscú e incurrirían en un "alto riesgo".