Zaragoza, 10 nov (.).- Ibercaja tuvo un beneficio neto de 80,7 millones de euros entre enero y septiembre de 2017, un 26,5 % menos que un año antes, debido principalmente al impacto del Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que supuso un gasto extraordinario de 71,6 millones, informó hoy la entidad en un comunicado.
Sin el impacto del ERE, el beneficio neto habría ascendido a 132,1 millones de euros, un crecimiento del 20,4 % interanual.
Según la entidad, el beneficio neto hasta septiembre tuvo su impulso en la intensificación de la actividad con clientes, tanto en recursos gestionados (+3,8 % interanual) como en la nueva financiación concedida (+4,1 %).
Los recursos de clientes totales administrados por Ibercaja se cifraban en 55.969 millones de euros a 30 de septiembre, tras aumentar 2.074 millones durante los últimos doce meses, lo que supone un crecimiento interanual del 3,8 %, precisó la entidad en una nota de prensa.
Los recursos fuera de balance (fondos de inversión, planes de pensiones y seguros de ahorro) mostraron un incremento de saldos de 2.678 millones (+11,9 % interanual), hasta alcanzar los 25.181 millones, y representan el 45 % del total de recursos gestionados por la entidad.
El patrimonio en fondos de inversión de Ibercaja Gestión aumentó un 23 %, hasta 11.954 millones de euros.
La cuota de mercado se ubicó en el 4,7 %, 23 puntos básicos más que en diciembre de 2016 y 90 más que al inicio del vigente Plan Estratégico 2015-2017.
Los saldos de ahorro a largo plazo en forma de planes de pensiones y seguros de vida crecieron un 4,6 % interanual, con un comportamiento muy similar en ambos bloques, hasta los 13.083 millones.
Ibercaja formalizó más de 4.000 millones de euros en nuevo crédito durante estos nueve meses, un 4,1 % más que en el mismo período de 2016. El 55 % de este importe (2.198 millones de euros) se ha destinado a la financiación de proyectos de inversión de pymes, segmento objetivo prioritario en el Plan Estratégico.
La financiación de circulante en empresas se incrementó un 29,8 % interanual, con un comportamiento destacado de la financiación al comercio exterior, que fue un 43 % superior entre enero y septiembre a la contratada en el mismo período de 2016.
Madrid y Arco Mediterráneo (Cataluña y Comunidad Valenciana) aglutinan el 51 % de este nuevo flujo crediticio, fruto de los planes de crecimiento de Ibercaja.
La dotación a provisiones cayeron un 66 % como resultado de la mejora de la coyuntura económica y de la gestión activa de la inversión irregular que está llevando a cabo el Banco.
Los activos problemáticos (dudosos más adjudicados) descendieron en 526 millones, un 10,9 % menos, gracias a una cartera de préstamos al sector promotor por importe de 490 millones de euros y a la venta individualizada de inmuebles adjudicados, que permitió liberar 12 millones de euros de provisiones.