FRÁNCFORT, 5 jul (Reuters) - Las energías renovables representaron el 49% del consumo eléctrico alemán en el primer semestre de 2022, lo que supone un aumento del 6% respecto al año anterior, gracias a unas condiciones meteorológicas favorables, según informaron el martes grupos del sector.
Tanto la mayor intensidad de la luz solar como la velocidad del viento explican en parte esta tendencia, dijeron en un comunicado la asociación de la industria de servicios públicos BDEW y el Centro de Investigación de Energía Solar e Hidrógeno (ZSW).
Las cifras preliminares se han calculado de acuerdo con los requisitos de la Unión Europea, que basan la cuota de mercado de las distintas fuentes de electricidad en el uso y no en la producción, una base también adoptada por Berlín para sus definiciones de objetivos climáticos, dijeron.
La cuota de las energías renovables en el consumo eléctrico alemán alcanzó el 50,2% en el primer semestre de 2020.
El consumo de energía de Alemania en general disminuyó un 0,8%, hasta 281.000 millones de kilovatios-hora (kWh), en los primeros seis meses de 2022.
La producción nacional de electricidad, por su parte, aumentó un 1,7% hasta los 298.000 millones de kWh, lo que impulsó el papel de Alemania como exportador neto de energía, según los datos.
La generación renovable, que junto con la eólica incluye la energía solar, la hidroeléctrica, la biomasa, los residuos y la geotérmica, aportó 139.000 millones de kWh al total, un 13,5% más que el año anterior.
La energía eólica terrestre supuso 59.000 millones de kWh, un 23% más, la fotovoltaica 33.000 millones, un 17,3% más, la biomasa 24.000 millones, un 3,7% más, y la eólica marina 12.000 millones, un 5% más.
La producción de electricidad convencional a partir de combustible nuclear, carbón y gas suministró 159.000 millones de kWh en el semestre, un 6,7% menos que en el mismo periodo de 2021.
Alemania redujo el año pasado las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en un 39% con respecto a 1990, pero su objetivo es alcanzar una reducción del 65% en 2030, para lo que necesita desplegar más energías renovables con cero emisiones de carbono.
(Reporte de Vera Eckert; edición de Miranda Murray y David Clarke, traducido por Tomás Cobos)