Montevideo, 4 dic (EFE).- El Banco Interamericano de Desarrollo
(BID) y la Secretaría General Iberoamericana (Segib) apelaron hoy a
mejorar la educación en los países de la región como forma de
desarrollo en respuesta a la crisis económica, que debe verse como
una oportunidad más que como un obstáculo.
"La crisis financiera de la cual estamos saliendo representa una
oportunidad para incorporarnos a la sociedad del conocimiento",
afirmó el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, durante el
seminario "El futuro de la educación en América Latina", enmarcado
en la celebración del 50 aniversario del organismo internacional.
Moreno remarcó que en la actualidad existen 200 millones de
latinoamericanos menores de treinta años, de los que depende el
futuro de esa zona del mundo.
Según datos del BID hace 50 años, uno de cada diez niños en la
región cursaba primaria, y hoy esa proporción ha aumentado a nueve
de cada diez, mientras que en la secundaria de uno de cada diez se
ha pasado a siete de cada diez en el mismo lapso.
Hace medio siglo, la población adulta tenía como promedio tres
años de estudios, cuando ahora esa cifra asciende a siete,
estadística que sin embargo significa la mitad del mundo
desarrollado.
Por ello, Moreno se mostró partidario de "mejorar aceleradamente
el capital humano", mediante proyectos como el Plan Ceibal, que ha
permitido en Uruguay entregar una computadora a cada niño en la
primaria.
El BID, dijo Moreno, considera esencial centrar esfuerzos en "la
educación temprana, la preparación para llegar en condiciones al
mercado laboral y el nivel de la docencia".
En el mismo seminario el Secretario General Iberoamericano, el
uruguayo Enrique Iglesias coincidió en la importancia de mejorar el
sistema educativo para superar los déficit de crecimiento económico,
social y democrático que todavía afectan a Latinoamérica.
Iglesias, homenajeado hoy por el Gobierno de su país y por el
propio BID, que él mismo presidió durante años, recalcó que para
establecer un modelo educativo es necesario primero fijar un modelo
de sociedad.
Advirtió de que el paradigma social "judeo-cristiano" que ha
imperado en el mundo desde finales de la Segunda Guerra Mundial y la
creación de las Naciones Unidas ha terminado y el mundo tiene ahora
que "conciliar nuevas cosmovisiones".
"Debido a los impactos de la crisis actual vamos a tener de
alguna manera una situación más compleja derivada de las nuevas
amenazas" que se ciernen sobre el planeta: el fanatismo, el crimen
organizado y el cambio climático, alertó.
Ante este panorama abogó por la cooperación regional, la
seguridad y la paz internacionales, pero sobre todo por la calidad
de la educación y la universalidad como mecanismos para avanzar.
"La puerta de salida de la pobreza es el trabajo, y la puerta de
salida del desempleo es la educación", resumió, antes de recordar
que el BID fue la primera institución que tomó esa última materia
como algo central en su labor de financiación del desarrollo.
Ese asunto centrará también la próximo Cumbre Iberoamericana de
Jefes de Estado y de Gobierno, que se celebrará en Argentina en
2010. EFE
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