Por Eva Taylor y Paul Carrel
FRANCFORT (Reuters) - Una serie de medidas de política monetaria anunciadas el mes pasado ayudarán a acelerar la inflación y a respaldar el crédito bancario, pero el Banco Central Europeo está listo para crear dinero en el futuro, si fuera necesario, dijo el jueves el presidente de la entidad, Mario Draghi.
El BCE mantuvo sin cambios el tipo de interés de referencia en un 0,15 por ciento tras reducirla el mes pasado a un mínimo nivel histórico, cuando también llevó la tasa de depósitos a territorio negativo por primera vez, cobrando a los bancos por dejar su dinero de un día para el otro con la finalidad de alentarlos a otorgar préstamos a empresas.
Las medidas anunciadas en junio también incluyeron la extensión de la duración de liquidez barata e ilimitada para bancos hasta finales de 2016 y el ofrecimiento de un plan de préstamos a cuatro años.
Draghi dijo que las medidas del mes pasado habían aliviado aún más la política monetaria de la zona euro.
"Las operaciones monetarias que tendrán lugar en los próximos meses se sumarán a este alivio y respaldarán a los préstamos bancarios", dijo Draghi en una conferencia de prensa después de la reunión del BCE.
"En la medida en que nuestras medidas surtan efecto en la economía, contribuirán a un retorno de tipos de inflación a niveles más cercanos a un 2 por ciento", agregó.
La inflación de la zona euro se mantuvo en un 0,5 por ciento el mes pasado, bastante por debajo de la meta del BCE de cerca, pero por debajo de un 2 por ciento y en lo que Draghi ha llamado la "zona de peligro".
Draghi afirmó que el consejo de Gobierno del BCE concuerda en su voluntad de lanzar un alivio cuantitativo -esencialmente, crear dinero para comprar deuda gubernamental o privada de bancos para mantener bajos los costes del crédito e impulsar el gasto- si la inflación se desacelerara más.
El responsable agregó que los riesgos a la recuperación económica siguen siendo primariamente negativos.
"El Consejo de Gobierno es unánime en su compromiso para usar también instrumentos no convencionales dentro de su mandato si fuera necesario para abordar nuevos riesgos de un período demasiado prolongado de inflación baja", sostuvo Draghi.
Pocos analistas esperan que eso sea remotamente posible hasta finales de este año. El banco central ha dicho que las medidas del mes pasado podrían demorar un año en surtir un efecto total.
"Tras el recorte de tipos de junio, esperarán (...) probablemente hasta fin de año para evaluar el efecto que tendrá eso", dijo el economista del banco Berenberg Christian Schulz.
PRÉSTAMOS
Los bancos que no otorguen préstamos tras recibir crédito barato del nuevo programa de financiación del BCE tendrán que devolver el dinero, sostuvo el BCE.
"Si el banco no entrega evidencias de que han producido algún crédito neto respecto al referencial, tendrán que pagar de vuelta", declaró Draghi en una rueda de prensa después del anuncio de la decisión del BCE.
El banco central está ansioso por evitar que se repita lo que sucedió con su ronda previa de financiación barato, buena parte de la cual usaron los bancos de la zona euro para comprar deuda de sus gobiernos.
El entregar detalles generales del nuevo programa de préstamos TLTRO, Draghi afirmó que los bancos podrían participar individualmente o como grupo si se cumplían ciertos criterios.
"Los bancos pueden retirar asignaciones adicionales en virtud del programa si generan préstamos elegibles en los dos primeros años del programa por encima de un referencial dado", dijo Draghi.
El jefe del BCE también informó que el banco central comenzará a reunirse cada seis semanas en vez de una vez al mes a partir del próximo año, imitando la frecuencia de las reuniones de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos.
Además, el BCE comenzará a publicar minutas regulares de sus reuniones, como lo hacen la Fed y el Banco de Inglaterra.