Río de Janeiro, 28 sep (EFE).- La petrolera estatal brasileña Petrobras anunció hoy que ha presentado ante los tribunales un pedido de suspensión cautelar de la orden de expulsión del país de la estadounidense Chevron y la contratista Transocean a raíz de un vertido de crudo.
Petrobras usa siete sondas de perforación de Transocean y ha contratado una octava, que todavía no ha sido puesta en funcionamiento, por lo que si estas empresas son expulsadas de Brasil, sufriría un "impacto" en su producción y sus actividades exploratorias, según un comunicado.
La petrolera brasileña dijo que también está analizando tomar "medidas alternativas" para reducir los efectos que tendría la pérdida de las sondas.
Transocean anunció que recibió este jueves la orden judicial, que le da un plazo de 30 días para interrumpir todas sus actividades en el país, una decisión a la que ha presentado un recurso.
La sanción, impuesta por el Tribunal Federal de Río de Janeiro, castigó a Chevron y Transocean por el vertido de 3.700 barriles de crudo ocurrido en noviembre pasado en un pozo de la compañía estadounidense en el yacimiento Campo de Frade, en la cuenca marítima de Campos, a 120 kilómetros de las costas cariocas.
El vertido ocurrió en unas grietas que surgieron en el lecho marino cerca del lugar donde Chevron realizaba perforaciones con las sondas de Transocean. EFE