México, 26 oct (EFE).- Los pasivos de la aerolínea Mexicana de Aviación, que fue suspendida desde agosto pasado, suman unos 9.000 millones de pesos (unos 725 millones de dólares), aseguró hoy el secretario de Comunicaciones y Transportes, Juan Molinar.
En declaraciones a los medios después de comparecer ante una comisión del Senado, el ministro aseguró que sí hay algunos inversionistas interesados en la aerolínea, pero señaló que éstos deben cubrir esos pasivos para reactivar a la empresa.
El grupo de Mexicana de Aviación, que incluye las aerolíneas Click y Link, suspendió sus operaciones el 28 de agosto debido a una severa crisis financiera y a la incapacidad para obtener capital fresco para mantener las actividades.
Molinar coincidió con el ministro de Trabajo, Javier Lozano, en que la situación de la aerolínea "es muy difícil", aunque se negó a afirmar que la quiebra sea "inminente".
El funcionario recordó en quiebras anteriores de Mexicana de Aviación, los gobiernos anteriores la rescataron; ahora el Gobierno "hará todo lo necesario" para evitar la quiebra, aunque aclaró que no se inyectarán recursos fiscales de toda la población para salvar a la empresa.
"Si encontramos algún capitalista que esté dispuesto a hacer un acuerdo con todos los acreedores, incluyendo los sindicatos, pues la empresa podrá salvarse, de otra forma pues se ve difícil", aseguró Molinar, aunque aclaró que "vamos a tomar pronto decisiones".
Afirmó que ante una eventual quiebra de Mexicana, otras empresas mexicanas de mucha importancia están realizando inversiones agresivas y fuertes para ocupar la oferta de asientos que Mexicana ha dejado de ofrecer.
Precisó que esa alternativa representará "oportunidades de crecimiento de Aeroméxico, de Volaris, de Interjet, de otras empresas mexicanas que deberán ocupar la demanda que deja de ofrecer Mexicana de Aviación, pero eso lo vamos a ver pronto", indicó.
La compañía se encuentra en proceso de concurso mercantil, que es un período legal previo a la quiebra, y en el cual un administrador nombrado por un juez analiza la viabilidad de la empresa, los posibles acuerdos de reestructura de su deuda con sus acreedores y se aprueba un plan viable para la operación de la empresa. EFE