Santiago de Chile, 4 feb (EFE).- La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), aseguró hoy que el menor crecimiento de la economía de América Latina y el Caribe tuvo un impacto negativo en la región en la tendencia a la reducción del hambre y la pobreza extrema durante 2012.
La FAO recordó que la expansión de la economía de la región en 2012 alcanzó el 3,1 %, levemente inferior a la del mundo (3,2 %, de acuerdo al Fondo Monetario Internacional), pero más de 2 veces superior a la de las economías avanzadas.
"Este crecimiento regional representa una desaceleración de 1,2 puntos porcentuales respecto al 2011 y una caída de 2,8 puntos respecto al crecimiento observado en 2010", precisó el organismo en el boletín trimestral de la Seguridad Alimentaria y Nutricional de la FAO, difundido este lunes.
El boletín (octubre-diciembre 2012), sostuvo que producto del menor crecimiento el número de pobres de América Latina se redujo en sólo un millón de personas en 2012.
"La pobreza extrema sigue afectando a 66 millones de personas, el 11,4 % de los habitantes de la región, cifra que no varió respecto de 2011", explicó el oficial principal de políticas de la FAO, Adoniram Sanches.
"Esto es una mala señal para la lucha contra el hambre, que también ha visto reducida su tendencia a la baja: entre 2007-2009 y 2010-2012 el hambre disminuyó sólo en un millón de personas, de 50 a 49 millones, mientras que entre 2004-2006 y 2007-2009 descendió cuatro millones, de 54 a 50", detalló Sanches.
Según el informe de la FAO, una de las consecuencias inmediatas de la desaceleración económica fue la disminución en el ritmo de reducción de la pobreza.
Si en 2011 la economía de la región creció 4,3 % y la pobreza se redujo en 8 millones de personas (3 millones de los cuales dejaron de ser indigentes), en 2012, la pobreza se redujo en solo un millón de personas y la indigencia no se modificó, precisó.
El organismo indicó que se mantuvo el número de personas en condición de indigencia debido a que el precio de los alimentos aumentó casi 9 % en 2012, de forma similar a lo que ocurrió en 2011 y redujo el ingreso real de las personas en pobreza extrema, que destinan una parte alta de sus ingresos a la compra de alimentos.
El resto de los bienes de la economía, según el estudio, se incrementaron de forma menor.
"Esta composición de la inflación (más alta en alimentos que en el resto de los bienes) afecta de forma diferenciada a los hogares y tiende a perjudicar de mayor manera a los más pobres", explicó Sanches.
Para la FAO, el menor crecimiento de la economía regional fue producto, principalmente, de la ralentización de América del Sur, que redujo su expansión en casi 2 puntos porcentuales respecto a 2011 y en casi 4 respecto a 2010.
En tanto, Centroamérica mantuvo una expansión por sobre el 4 %, mientras que el Caribe alzó su crecimiento en 0,7 puntos hasta 1,1 % en 2012.
"Al interior de la región, Centroamérica es la subregión que experimentó el mayor crecimiento promedio en 2012, impulsado por Panamá, que exhibió un 10,5 % de aumento en la actividad económica. El resto mostró niveles iguales o inferiores a 5 %", subrayó el informe.
En el Caribe, Belice fue el país de mayor crecimiento (4,2 %), seguido por Guyana (3,8 %) y Bahamas (2,5 %).
Suramérica, finalmente, mostró un crecimiento relativamente parejo en sus países. La Mayoría exhibió niveles sobre 3,5 %.
Argentina, Brasil y Paraguay son los países que menos crecieron, el último de ellos incluso se contrajo casi 2 %.
Países como Perú, Chile, Venezuela y Bolivia lideraron la expansión de la subregión con crecimientos sobre 5 %, y se ubicaron en los primeros lugares de toda América Latina y el Caribe, sólo por detrás de Panamá. EFE