28 jul (Reuters) - Las fuerzas rusas tomaron la segunda central eléctrica más grande de Ucrania y están llevando a cabo un "redespliegue masivo" de tropas en tres regiones del sur, dijo un asesor presidencial ucraniano, ante las expectativas de una contraofensiva ucraniana.
Las fuerzas respaldadas por Rusia dijeron el miércoles que habían capturado intacta la central eléctrica de carbón de la era soviética de Vuhlehirsk, lo que supuso el primer avance significativo de Moscú en más de tres semanas.
Oleksiy Arestovych, asesor del presidente ucraniano Volodímir Zelenski, confirmó la captura de la planta en la región oriental de Donetsk, pero dijo que era sólo una "pequeña ventaja táctica" para Rusia.
Añadió que el redespliegue ruso en el sur parecía ser un cambio hacia la defensa estratégica desde el ataque, con tropas enviadas a las regiones de Melitopol, Zaporiyia y Jersón.
Ucrania ha dejado clara su intención de recuperar la ciudad sureña de Jersón, que cayó en manos de Rusia en los primeros días de la guerra.
Oleksiy Danilov, secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, tuiteó anteriormente que Rusia estaba concentrando "el máximo número de tropas" en dirección a Jerson, pero no dio detalles.
Las fuerzas ucranianas en el sur dijeron que habían matado a 66 soldados enemigos y destruido tres tanques y dos depósitos de armas en las últimas 24 horas. Las fuerzas rusas atacaron la ciudad de Mikoláiv con múltiples lanzamisiles, añadieron.
Reuters no pudo verificar estas informaciones del campo de batalla.
Ucrania también bombardeó un importante puente que atraviesa el río Dniéper en Jersón, cerrándolo al tráfico. Funcionarios rusos habían dicho anteriormente que recurrirían a los puentes de barcas y a los transbordadores para que las fuerzas cruzaran el río.
Zelenski dijo que Ucrania reconstruiría el puente Antonivskyi sobre el Dinéper y otros cruces en la región.
"Estamos haciendo todo lo posible para que las fuerzas de ocupación no tengan ninguna oportunidad logística en nuestro país", dijo en un discurso el miércoles por la noche.
DIPLOMACIA
Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero en lo que Moscú llama una "operación militar especial" para desmilitarizar y "desnazificar" a su vecino. Ucrania y sus aliados califican la invasión de guerra de agresión no provocada.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo que tenía previsto mantener una conversación telefónica con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, la primera entre ambos diplomáticos desde antes del inicio de la guerra.
La llamada en los próximos días no sería "una negociación sobre Ucrania", dijo Blinken en una conferencia de prensa, reafirmando la posición de Washington de que cualquier conversación sobre el fin de la guerra debe ser entre Kiev y Moscú.
Rusia no ha recibido ninguna petición formal de Washington sobre una llamada telefónica entre Blinken y Lavrov, informó la agencia de noticias TASS.
GAS Y GRANOS
Rusia redujo el miércoles los flujos de gas hacia Europa en un enfrentamiento energético con la Unión Europea. Ha bloqueado las exportaciones de grano de Ucrania desde su invasión, pero el viernes acordó permitir las entregas a través del mar Negro hasta el estrecho del Bósforo en Turquía y hacia los mercados globales.
El acuerdo se puso en duda casi inmediatamente cuando Rusia disparó misiles de crucero contra Odesa, el mayor puerto de Ucrania, el sábado, apenas 12 horas después de la firma del acuerdo.
Antes de la invasión y las posteriores sanciones, Rusia y Ucrania representaban casi un tercio de las exportaciones mundiales de trigo.
Las fuerzas rusas y las respaldadas por Rusia han tenido dificultades para lograr avances significativos sobre el terreno desde que capturaron a principios de julio la ciudad ucraniana oriental de Lisichansk.
Han sido rechazadas repetidamente por la feroz resistencia ucraniana.
(Información de las oficinas de Reuters; redacción de Grant McCool y Stephen Coates; edición de Cynthia Osterman y Lincoln Feast, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)