Moscú, 4 dic (.).- Las exportaciones rusas de gas natural licuado (GNL) a la Unión Europea (UE) alcanzaron en noviembre el máximo histórico de 1,75 millones de toneladas, una situación que los expertos vinculan con los problemas del tránsito en el canal de Panamá, según informó hoy el diario "Kommersant".
"Aunque Europa ha prescindido prácticamente del gas natural ruso por tubería, no ha perdido el gusto por el GNL del mismo origen", señala el medio, según el cual el mes pasado Rusia exportó 2,914 millones de toneladas de gas licuado, más de la mitad a la UE.
Además, se trata de un incremento del 9,3 % en relación con las cifras de noviembre de 2022.
Las exportaciones rusas de GNL a Europa en noviembre equivaldrían a más de 2.500 millones de metros cúbicos de gas natural de tubería.
El anterior récord de exportaciones de gas licuado ruso a Europa se alcanzó en diciembre de 2022, con un volumen de 1,75 millones de toneladas, según la plataforma comercial Kpler.
Los principales destinos del GNL fueron Francia, a la que la fábrica rusa Yamal SPG de Novatek envió seis buques; y Bélgica, que recibió diez buques desde la planta Kriogaz-Visotsk, de la misma corporación.
La prensa española informó de que en lo que va de año España ha comprado a Rusia un 43 % más de gas licuado que en 2022 y ha multiplicado por seis su dependencia del gas ruso respecto a 2018, debido al cierre del gasoducto Magreb-Europa.
El analista de Kpler Viktor Katona vinculó el incremento de las exportaciones de GNL ruso a Europa a "atascos" en el canal de Panamá que han repercutido considerablemente en los costes de suministros a través del Atlántico.
"Por ello, los compradores europeos han incrementado las exportaciones de los países relativamente cercanos. Los suministros de EEUU crecen de mes en mes; Argelia sigue en el negocio; Rusia alcanza máximos históricos; mientras Catar y otros países más lejanos ceden posiciones", explicó.
Curiosamente, en este contexto las exportaciones rusas de GNL a China se redujeron considerablemente en noviembre, hasta los 100.000 millones de toneladas, una cifra ocho veces menor que en octubre.
Esto se debe principalmente a que los precios futuros en Europa eran semejantes e incluso mayores que los precios de Asia, por lo que los exportadores rusos orientaron sus ventas al viejo continente, no tanto debido una baja demanda china sino a precios más atractivos.
El GNL ruso no ha sido incluido en las sanciones europeas contra Rusia por la guerra en Ucrania, pero la UE mantiene sus esfuerzos en reducir "drásticamente" su dependencia de los combustibles fósiles rusos, eliminando el carbón, recortando las importaciones de petróleo un 90 % y reduciendo las compras de gas.
En la actualidad, Europa compra cerca de 40.000 millones de metros cúbicos de gas, frente a los 155.000 millones de metros cúbicos de 2021.
Pese al cambio de rumbo, la UE ha gastado 179.327 millones de euros en hidrocarburos rusos desde el inicio de la guerra de Ucrania.