Bruselas, 21 oct (EFE).- Rusia y Ucrania no lograron hoy cerrar un acuerdo para solucionar la crisis del gas que mantienen desde hace meses, pero han acordado volver a reunirse el miércoles de la próxima semana en Bruselas, informó hoy la Comisión Europea (CE), que actúa de mediadora.
"Hoy hemos alcanzado una posición que ahora será discutida por todas las partes", dijo en una rueda de prensa el comisario europeo de Energía, Günther Oettinger, quien confía en que la próxima semana por fin se pueda sellar el principio al acuerdo ya alcanzado el pasado 26 de septiembre.
El comisario europeo explicó que Rusia ha aceptado rebajar el precio hasta 385 dólares por cada mil metros cúbicos de gas que se entreguen a Ucrania de aquí a marzo, frente a 485 dólares actuales, pero que insiste en que cualquier nueva entrega de combustible solo se cumpla si Kiev paga por adelantado.
Sobre lo que no hay acuerdo es acerca de los volúmenes de gas que podría necesitar Ucrania en los próximos meses.
Oettinger explicó que, tras analizar la situación, se cree que Ucrania podría necesitar en invierno unos 4.000 millones de metros cúbicos de gas, aunque son las autoridades del país las que deben precisar esta cifra.
El ministro de Energía ruso, Aleksandr Novak, que también se dirigió a la prensa tras el encuentro trilateral, coincidió en que Ucrania aún no ha precisado sus necesidades y subrayó que la nueva entrega de gas depende en cualquier caso de si Kiev tiene recursos económicos para pagarlo.
"Ucrania no ha confirmado aún sus recursos, solo hemos oído que la CE no ha confirmado las fuentes de financiación", añadió.
Oettinger será de nuevo la próxima semana anfitrión de un encuentro tripartito que tras meses de negociaciones tratará de encontrar una solución que permita garantizar el suministro de gas ruso este invierno a toda Europa.
El pasado 26 de septiembre, Moscú y Kiev sellaron un pacto en Bruselas que obliga a Ucrania a pagar antes de fin de año 3.100 millones de dólares (2.430 millones de euros) a Rusia por consumos previos.
Las partes también se comprometieron a esperar a la sentencia del Tribunal de Arbitraje de Estocolmo para resolver el contencioso del precio.
Rusia cortó el flujo de gas hacia Ucrania el pasado 16 de junio, tras la disputa con Kiev sobre una deuda acumulada por los suministros de ese combustible.
Durante algunos meses de invierno de 2006, 2008 y 2009 se produjeron las conocidas como "guerras del gas", en la que las desavenencias entre Moscú y Kiev por el precio del carburante desembocaron en cortes en el suministro por parte de Rusia.