Investing.com - Los precios del petróleo se recuperan este miércoles ante las nuevas expectativas de un posible acuerdo de Brexit entre el Reino Unido y la Unión Europea.
Los futuros de petróleo crudo del WTI de Estados Unidos suben un 0,3% hasta 52,97 dólares por barril a las 7:13 horas (CET) mientras que los futuros de Brent de referencia internacional se apuntan un alza del 0,3% hasta 58,91 dólares.
También respaldan los precios del petróleo los informes acerca de que el Secretario General de la OPEP, Mohammad Barkindo, dijo que la Organización de Países Exportadores de Petróleo "hará lo que esté en su poder" para mantener la estabilidad del mercado petrolero más allá de 2020.
Los datos semanales de reservas de crudo de Estados Unidos del Instituto Americano del Petróleo y de la Administración de Información Energética se publicarán el jueves y el viernes.
Los informes se publicarán con un día de retraso con motivo de una festividad del Gobierno de Estados Unidos.
Si bien no es un impulsor del rumbo de los mercados petroleros, las preocupaciones en torno a los nuevos problemas en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China han resurgido.
Según informes de esta semana, Pekín ahora quiere que Estados Unidos revierta los aranceles antes de aceptar la compra de hasta 50.000 millones de dólares en productos agrícolas estadounidenses en virtud de la "fase uno" del acuerdo comercial pregonado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La tensión entre ambas partes ha aumentado aún más después de que la Cámara de Estados Unidos aprobara la Ley de Derechos Humanos y Democracia de Hong Kong.
Se requeriría una revisión anual de que la ciudad es lo suficientemente autónoma para que Pekín justifique su estatus comercial especial en el marco de la ley estadounidense.
China ha prometido tomar represalias si Estados Unidos aprueba la ley.
Mientras tanto, la noticia de una explosión en la refinería Sasref de Arabia Saudí han sido algunos de los obstáculos para los precios del petróleo. La explosión, provocada por una fuga de gas, revivió las preocupaciones en torno a las interrupciones del suministro después del ataque del 14 de septiembre contra la gigantesca planta de procesamiento de petróleo del reino Abqaiq que inhabilitó temporalmente la mitad de la producción bruta mundial diaria.