Lara Malvesí
Nueva York, 24 dic (EFE).- Aunque Wall Street cerró hoy mixto rompiendo su racha de subidas y con el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, con pérdidas del 0,29 % ante el temor de que el precio del petróleo vuelva a caer tras el rebote técnico, rubricó su mejor semana desde mediados de noviembre.
Ese índice cayó 50,92 enteros hasta los 17.551,69 puntos, mientras que el selectivo S&P 500 bajaba un 0,16 % o 3,35 puntos hasta los 2.060,94 y el compuesto del mercado Nasdaq se anotaba un progreso del 0,05 %, 2,56 unidades, hasta los 5.048,49.
Después de tres días de progreso paralelo de los precios del crudo y de los mercados de Nueva York, Wall Street compartió tanto pérdidas como ganancias cerrando así en rojo y verde la jornada corta en Wall Street teniendo en cuenta que el parqué permanece cerrado en Navidad.
Los operadores vieron abrir este jueves el precio del crudo de nuevo con subidas y un precio por barril para el petróleo de Texas (WTI) de 38,04 dólares.
Sin embargo, los analistas prevén que el rebote técnico de precios que vive el petróleo tras semanas en mínimos pueda revertirse en cualquier momento, amargando la entrada de año.
El veterano analista de Wall Street Art Cashin apostaba porque el fin del rebote técnico que viven los precios del petróleo se desinfle en los próximos días.
En el Dow Jones, el sector energético vivió la peor parte (-0,9 %) con las acciones de cayendo un 1,9 % y las de Exxon Mobil (N:XOM) un 1,1.
Pese a las subidas de los últimos días, el precio del barril de Texas ha caído un 29 % este año por las preocupaciones de la saturación de distribución global.
La próxima semana serán las cinco últimas sesiones del año, habitualmente cargadas de compras y ventas.
Pese a que lo habitual es que el año que precede a unos comicios electorales en EE.UU. sea de importantes subidas, Wall Street ha navegado a la deriva, sin señuelos, ni caminos de ganancias claros, durante un gran número de sesiones este 2015.
Las materias primas y, especialmente, el petróleo marcarán el rumbo del final del año y la inauguración del 2016, con lo que la volatilidad está servida.
Atrás queda ya enterrado por el momento el fantasma de la subida de tipos de la Reserva Federal del 16 de diciembre, que ha dejado al petróleo por esta vez su disfraz de "Grinch" de la Navidad en los mercados.