El inversor debe tomar decisiones bajo mucha incertidumbre. ¿Subirá el precio? ¿Bajará el precio? Si nos equivocamos, perdemos dinero. Si acertamos, ganamos dinero. El problema es que nadie sabe con seguridad el futuro del precio. En estos casos, no tenemos más opción que apoyarnos en la información disponible y en la teoría de la probabilidad. La interpretación del “sentimiento” del mercado nos puede aportar mayor claridad. No es una bola de cristal. Pero sí es una referencia para orientarnos. Nos puede ayudar a hacer mejores pronósticos. Por ende, nos puede ayudar a tomar mejores decisiones financieras.
Ahora bien, las ballenas son las que mueven el mercado. Claro que las ballenas/instituciones a veces se mueven con los minoristas y a veces se mueven contra los minoristas. Lo más rentable es moverse con las ballenas. Esa diferencia normalmente la indica el volumen en la acción del precio. Si analizamos esto, de la mejor manera posible, en el contexto del sentimiento y la realidad macroeconómica, nuestros pronósticos serán mucho más poderosos.
- ¿Cuál es tu gestión de riesgo?