El ex-CEO de FTX, Sam Bankman-Fried, ha negado rotundamente las acusaciones contra él en una "visión general pre-mortem" de la insolvencia de su exchange de criptomonedas.
En un post del 12 de enero en Substack, Bankman-Fried afirmaba que existía una vía para que los clientes de determinadas empresas bajo el paraguas de FTX fuesen reembolsados tras la quiebra de la firma. Según el ex ejecutivo, FTX US era "plenamente solvente" al momento en que la empresa se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras, con unos USD 350 millones en efectivo.
Bankman-Fried añadió que FTX International tenía unos USD 8,000 millones en activos al momento en que John Ray asumió el cargo de CEO, y se comprometió a utilizar "casi todos" sus activos personales en un esfuerzo por reembolsar a los usuarios. Luego de que FTX se declarara en quiebra, el ex CEO afirmó que sólo tenía USD 100,000 en su cuenta bancaria, y más tarde recurrió a sus padres para que pusieran su casa como fianza en el marco de su causa penal.