Atenas, 27 jul (EFE).- Un grupo de expertos de la Unión Europea (UE) y del Fondo Monetario Internacional (FMI) han iniciado hoy en Atenas una inspección de las políticas de austeridad del Gobierno griego, de cuyo cumplimiento depende la entrega de nuevas ayudas, según confirmó a Efe el Ministerio de Finanzas.
Aunque la agenda de las reuniones no ha sido hecha pública, fuentes del ministerio de Finanzas heleno citadas por los diarios Kathimerini, To Vima y Ta Nea, aseguran que los expertos iniciarán su misión, que durará dos semanas, con una inspección de los gastos e ingresos estatales.
Esta tarde se reunirán con el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos.
Con la información recogida durante su estancia en Grecia, los expertos de la UE, del Banco Central Europeo y del FMI elaborarán un informe sobre el grado de cumplimiento de las políticas de ahorro.
La zona del euro y el FMI tienen previsto entregar en septiembre 8.000 millones de euros, correspondientes al sexto tramo del préstamo de 110.000 millones de euros concedido el año pasado para evitar la quiebra del país.
Las reformas estructurales y el programa de recortes y privatizaciones del Gobierno pretende recaudar 78.000 millones de euros hasta el año 2015.
Son justo las privatizaciones uno de los puntos en el que los expertos prestarán más atención, ya que su ejecución es uno de los principales requisitos de la zona del euro y del FMI.
El equipo mostrará también especial atención al equilibrio entre ingresos y gastos estatales, un capítulo en el que se ha detectado ya este año un agujero de 4.500 millones de euros más de lo previsto hasta ahora.
El FMI considera que Grecia ha hecho mucho para reducir el déficit y lograr la consolidación fiscal, pero que aún hay mucho por hacer.
El pasado 21 de julio, Grecia consiguió que los socios europeos acordaran darle un nuevo rescate de unos 160.000 millones de euros.
El nuevo rescate incluye 109.000 millones de euros de los socios europeos y del Fondo Monetario Internacional (FMI), más otros 49.000 millones que saldrán de los acreedores privados. EFE